Millones de habitantes de Texas se quedaron sin electricidad en momentos de temperaturas bajas extremas. Quienes tuvieron la suerte de que no les corten el suministro de energía ahora reciben facturas por montos de miles de dólares por unos pocos días de uso. Estos montos altísimos en las facturas son el resultado de años de desregulación del mercado energético impulsada por el estado, dice Tyson Slocum, director del Programa de Energía de la organización Public Citizen. “En estos contextos de desregulación se ven empresas inescrupulosas que se aprovechan porque asumen que en los hogares no entenderán ni leerán la letra chica”, dice Slocum. También hablamos con la texana Akilah Scott-Amos, cuya factura de elctricidad ascendió a más de once mil dólares durante la tormenta. “No tengo problemas de pagar lo que me corresponde. Pero esto no es justo”, dice Scott-Amos.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que mantuvimos con Akilah Scott-Amos y Tyson Slocum.