En el noreste de Siria, más de 150 personas murieron después de que combatientes del Estado Islámico lanzaran un ataque coordinado contra una prisión, con el objetivo de liberar a hombres y niños que habían sido capturados por una milicia kurda siria respaldada por Estados Unidos. El ataque llevó a las fuerzas armadas estadounidenses a ordenar bombardeos aéreos desde helicópteros artillados. La prisión permanece sitiada, y los combatientes kurdos afirman que el Estado Islámico está utilizando como escudos humanos a cientos de menores tomados como rehenes. Casi 700 hijos de presuntos combatientes del Estado Islámico han sido detenidos en la prisión por una milicia kurda respaldada por Estados Unidos, conocida como “las Fuerzas Democráticas Sirias”. El año pasado, un informe de Naciones Unidas reveló que las condiciones dentro de la cárcel equivalían a una situación de tortura, debido a que los prisioneros estaban amontonados en celdas abarrotadas, privados de luz solar, atención médica y una alimentación adecuada.
Mueren 150 personas en un ataque a una prisión siria
Titular24 Ene. 2022