El Gobierno ucraniano afirma que alrededor de cien personas lograron evacuar la planta siderúrgica de Mariupol, que se encuentra sitiada. La planta es lugar de refugio para miles de civiles y combatientes desde hace varias semanas, luego que las fuerzas rusas tomaran el control de buena parte de esa estratégica ciudad portuaria. Varios acuerdos previos para establecer “corredores humanitarios” habían fracasado. Mientras tanto, con su llegada a Kiev, la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU. Nancy Pelosi, se convirtió en la funcionaria estadounidense de mayor jerarquía que visita el país, días después de que el presidente Joe Biden le pidiera al Congreso de su país 33 mil millones de dólares más en concepto de ayuda militar y humanitaria para Ucrania. Para conocer más sobre la guerra en Ucrania, ya en su décima semana, conversamos con el secretario general del Consejo Noruego para Refugiados, Jan Egeland, que ha estado visitando ciudades ucranianas “devastadas más allá de lo imaginable” por la invasión rusa. “No creo que el mundo haya entendido bien que este sufrimiento se profundizará aún más, especialmente en el Este y el Sur, si se permite que la guerra continúe como hasta ahora”. Egeland dice que la única manera de poner fin a la guerra es a través de conversaciones y advierte el peligro de una “carrera armamentista” que podría seguir exacerbando el conflicto.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que tuvimos con Jan Egeland.