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En diciembre de 2022, la científica y ambientalista Rose Abramoff realizó, junto a su colega Peter Kalmus, una acción de protesta en el encuentro anual de la Unión Estadounidense de Geofísica, el mayor evento mundial del ámbito científico dedicado al estudio de la Tierra y el espacio. Abramoff y Kalmus subieron al escenario y desplegaron una pancarta que decía: “Salgamos del laboratorio a las calles”. El objetivo de esta acción directa no violenta fue llamar al mundo científico a la acción con respecto a la crisis climática. Esta no fue la primera acción ambientalista de Abramoff. Anteriormente se había encadenado a una puerta de la Casa Blanca y a una cerca en el Aeropuerto Internacional Charlotte Douglas como parte de una serie de manifestaciones globales, coordinadas por una organización llamada Scientist Rebellion. El objetivo de dicha organización es crear conciencia sobre el impacto ambiental de los viajes aéreos de lujo. Abramoff trabajaba como científica de la Tierra para el Laboratorio Nacional Oak Ridge, ubicado en Tennessee, que depende del Departamento de Energía de Estados Unidos. Pero en un artículo de opinión publicado por el periódico The New York Times en enero de 2023, anunció: “Soy una científica que expresó abiertamente su opinión sobre el cambio climático y me despidieron”.
Para ampliar esta información, vea (en inglés) nuestra conversación con Rose Abramoff.