El Gobierno francés ha prohibido todas las manifestaciones en contra del bombardeo israelí contra Gaza y del bloqueo total de ese territorio. El jueves, la policía de París utilizó gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersar a manifestantes a favor de Palestina que se habían congregado a pesar de la prohibición.
Ryan: “Lamentablemente, no pudimos protestar de manera adecuada porque nuestra manifestación estaba prohibida, mientras que las manifestaciones a favor de la causa israelí estaban autorizadas. Esto no es normal en un Estado de derecho”.
En el Reino Unido, activistas se comprometieron a emprender acciones legales si las autoridades prohíben ondear la bandera palestina. La ministra del Interior británica, Suella Braverman, instó a la policía a utilizar “toda la fuerza de la ley” contra los manifestantes que ondeen la bandera palestina, lo que, según la ministra, “podría ser ilegal” si se considera que ese hecho constituye una señal de apoyo al “terrorismo”.
En Australia, activistas en defensa de los derechos humanos advierten que el Gobierno australiano está tomando medidas cada vez más represivas contra las movilizaciones de apoyo a Palestina. El comisionado de policía interino del estado de Nueva Gales del Sur, Dave Hudson, afirmó que los agentes no necesitarán tener una causa razonable para registrar a las personas que participen en las marchas programadas en Sídney este fin de semana.
Comisionado Dave Hudson: “Insto a las personas que estén pensando en ingresar a la ciudad este domingo a reconsiderar su decisión. Hay una serie de alternativas pacíficas para que la gente exprese su opinión en relación con el conflicto que está teniendo lugar actualmente en Israel y Gaza”.