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Israel está intensificando su guerra contra el Líbano y lanzó en una noche los bombardeos más fuertes registrados hasta el momento sobre los suburbios densamente poblados del sur de Beirut. El jueves 3 de octubre, el ministro de salud del Líbano dijo que al menos 2.000 personas han muerto desde el inicio de los ataques israelíes, entre ellas al menos 127 menores de edad, en su mayoría en las últimas dos semanas. Además, hay más de 1,2 millones de personas desplazadas y los hospitales de Beirut se encuentran desbordados al incrementarse las víctimas de los ataques. La Organización Mundial de la Salud ha declarado que los ataques de Israel mataron a 28 trabajadores de la salud en un lapso de solo 24 horas e impidieron que la OMS hiciera llegar a Beirut un gran lote de suministros médicos. Mientras tanto, el Ejército israelí parece estar preparándose para profundizar su incursión terrestre en el sur del Líbano. Desde Beirut, nos acompaña Kareem Chehayeb, de la agencia periodística Associated Press, para analizar la situación en la región, donde las tensiones siguen en aumento. Chehayeb cuenta que el Líbano se está acostumbrando a “la nueva normalidad” de los ataques aéreos cotidianos por parte de Israel en la capital, el desplazamiento masivo y los combates entre Israel y las fuerzas de Hezbolá en el sur. “Las cosas se están moviendo a un ritmo muy rápido […] y realmente no queda claro cuál es el objetivo final de Israel”.
Para ver la entrevista completa en inglés, haga clic aquí.
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