Hablamos con el marido y la hermana de Ayşenur Ezgi Eygi, una activista
turca-estadounidense que murió en un ataque de las fuerzas armadas israelíes en el territorio ocupado de Cisjordania en septiembre. Sus familiares vienen criticando al Gobierno de Biden por la falta de una investigación independiente sobre su muerte. Eygi, una joven de 26 años que recientemente se había graduado de la Universidad de Washington, murió por los disparos efectuados por militares israelíes en una de las manifestaciones semanales contra los asentamientos israelíes ilegales en la localidad de Beita, en la que estaba participando como observadora internacional. Según testigos del hecho, un francotirador israelí le disparó cuando la manifestación ya se había dispersado. A principios de esta semana, familiares de Eygi mantuvieron una reunión con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, de la cual salieron con pocas esperanzas de que Estados Unidos responsabilice a Israel por el hecho. “La rendición de cuentas comienzará cuando Estados Unidos inicie una investigación sobre la muerte de una ciudadana estadounidense a manos de un país aliado”, plantea Hamid Ali, esposo de Eygi. “La respuesta a la pregunta de por qué no hay justicia para mi esposa es que Israel ha gozado a lo largo de su existencia de un nivel de impunidad que ningún otro país, ningún otro Estado en el mundo, tiene”.
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