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Human Rights Watch acusa a Israel de cometer el crimen de exterminio y actos de genocidio al restringir deliberadamente la provisión de agua potable y para usos sanitarios en la Franja de Gaza. En su informe, la organización de derechos humanos describe cómo Israel ha cortado el agua y bloqueado la entrada de combustible, alimentos y ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, además de destruir y provocar un daño deliberado a la infraestructura de agua y saneamiento, así como a los materiales para reparar los sistemas de agua. Hablamos con uno de los editores del informe, Bill Van Esveld, director asociado interino de Human Rights Watch para Israel y Palestina, quien señala que se observa “una clara política de Estado de privar de agua a la población de Gaza”. Esta es la primera vez, desde el inicio de la actual guerra contra Gaza, que Human Rights Watch caracteriza la política israelí como actos de genocidio.
Para ver la entrevista completa en inglés, haga clic aquí.
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