Este jueves se produjeron dos accidentes en aviones de pasajeros 737 de la compañía Boeing. En Senegal, un avión 737-300 se prendió fuego y se salió de la pista cuando se disponía a despegar. Diez personas resultaron heridas en el incidente. En Turquía, un neumático de un avión 737-800 de Boeing explotó al aterrizar. Las 190 personas a bordo fueron evacuadas. Un día antes, un avión de carga Boeing 767 de la compañía de logística estadounidense FedEx aterrizó en el aeropuerto de Estambul sin el tren de aterrizaje delantero desplegado y con el morro tocando la pista.
Los tres accidentes se producen al tiempo que surge un nuevo denunciante de defectos en los aviones Boeing. Se trata de Santiago Paredes, un exempleado de la empresa Spirit AeroSystems, el mayor proveedor de Boeing. Paredes declaró a la prensa que solía encontrar hasta 200 defectos en los fuselajes que se entregaban a Boeing.