El Ejército israelí desplegó un gran contingente en la frontera con la Franja de Gaza, debido a que se está preparando para una gran ofensiva con relación al secuestro de un soldado. El cabo Gilad Shalit fue secuestrado el domingo, en una operación palestina que causó la muerte de dos soldados israelíes y de dos palestinos. El lunes, grupos palestinos ofrecieron llevar a Israel a donde se encuentra el cabo Shalit a cambio de que se libere a todas las prisioneras palestinas y a los menores de 18 años palestinos detenidos en prisiones israelíes. No obstante, Israel rechazó la exigencia, alegando que atacará al líder de Hamas si no liberan al soldado.
El embajador de Israel para las Naciones Unidas, Danny Gilerman, dijo: “Israel dejó muy en claro que responsabiliza a Hamas, la organización terrorista, por la vida de este soldado que sabemos está vivo, y hace responsable al Presidente (palestino) Mahmoud Abbas de que vuelva a casa sano y salvo. Israel hará todo lo que esté a su alcance para proteger a su gente, Israel considera que este incidente es muy grave y se asegurará de que la comunidad internacional y la Autoridad Palestina hagan todo lo más rápido posible para asegurarse de que éste soldado vuelva con su familia sano y salvo”.
Mientras tanto, el Viceprimer Ministro palestino, Naser Al-Shaer, le hizo un pedido a los secuestradores: “Recomendamos que no le hagan daño al soldado israelí, porque no queremos darle al Ejército israelí ninguna excusa para la escalada. Por eso pedimos que no le hagan daño y le pedimos a la comunidad internacional que ayude a nuestra gente en la Franja de Gaza”.
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