Los proyectiles israelíes también impactaron una red de distribución de energía eléctrica en el norte de Gaza. Esto sucedió sólo dos días después de que los aviones de guerra israelíes bombardearan la principal central de energía eléctrica de Gaza, lo que dejó a gran parte de la ciudad sin electricidad. La Organización de las Naciones Unidas advierte que dentro de tres días Gaza afrontará una crisis humanitaria mortal, a menos que Israel restituya el combustible y la energía eléctrica. Según el periódico Haaretz, Israel no ha permitido que llegue combustible a Gaza durante los últimos cuatro días. Muchos de sus residentes ahora no cuentan con agua potable, porque dependen de la electricidad para bombear el agua. El Coordinador de Ayuda de Emergencia de la ONU, Jan Egeland, dijo que las acciones militares contra civiles inocentes violan las leyes humanitarias internacionales. Israel está siendo cada vez más criticado por su decisión de capturar a por lo menos 64 legisladores de Hamas, entre los que se encontraba el Ministro de Asuntos Exteriores palestino. Un tercio de los miembros del gabinete palestino ahora se encuentran detenidos por Israel.
El enviado de la ONU Álvaro de Soto, dijo: “No entiendo qué propósito cumplen estos arrestos (el de los legisladores y ministros de Hamas), no entiendo qué relación tienen con el objetivo de una operación, que según entiendo, fue planeada para obtener la liberación de Gilat Shalit”.
Sin embargo, Israel defendió su acción.
El Ministro de Seguridad Interior, Avi Dichter, dijo: “Pondremos en prisión a cada persona perteneciente a Hamas si sospechamos que tiene alguna relación con la filosofía de Hamas (…) que significa matar, asesinar a israelíes sin importar si se trata de civiles o soldados. Sin importar si se trata de los límites de Israel, Cisjordania, la Franja de Gaza, o los territorios hacia Israel”.
Hoy temprano Israel le suspendió el derecho a la residencia de Jerusalén a cuatro funcionarios de Hamas.