El Presidente Bush se negó a descartar la posibilidad de otorgarle un perdón absoluto a Lewis “Scooter” Libby, el ex jefe de personal del Vicepresidente Dick Cheney. Bush conmutó la condena de treinta meses de prisión impuesta a Libby el lunes, poco después de que un panel federal de apelaciones dictaminara que éste debía cumplir la condena mientras apelaba el fallo. Eso significaba que el encarcelamiento de Libby era inminente, y la Oficina de Prisiones de Estados Unidos ya le había asignado un número de identificación de prisionero. El ex jefe de personal de Cheney fue hallado culpable en marzo, y fue el funcionario de la Casa Blanca de más alto rango en ser condenado a prisión desde el escándalo Irán-Contras. Se lo declaró culpable de perjurio, obstrucción de la justicia y de prestar falsas declaraciones en la investigación sobre quién reveló la identidad de la agente de la CIA Valerie Plame. El martes, Bush defendió su decisión ante los periodistas frente al Centro Médico del Ejército Walter Reed.
Nuevas cifras indican que ahora hay una fuerza en Irak que supera en número a los soldados estadounidenses: los contratistas privados. Según Los Angeles Times, hay más de 180.000 contratistas privados financiados por Estados Unidos en Irak. Esta cifra supera al número de soldados estadounidenses y de funcionarios del gobierno sumados. La mayoría de los contratistas son iraquíes, mientras que 21.000 son estadounidenses y 43.000 son de otros países. Probablemente la cifra real sea aún más alta, porque no todos los contratistas de seguridad fueron contabilizados.
El Presidente Bush conmemoró el Cuatro de Julio con un discurso ante los soldados estadounidenses de una base aérea en Virginia Occidental. El Presidente reiteró su postura contra una retirada de Irak, y dijo que continuar con el compromiso requerirá más “sacrificio”.
En otras noticias de Irak, el Pentágono afirma que está investigando nuevas acusaciones de crímenes cometidos durante el ataque a Fallujah, hace tres años. Se dice que infantes de marina de Estados Unidos asesinaron a ocho prisioneros iraquíes desarmados cuando las fuerzas estadounidenses atacaron Fallujah en noviembre de 2004. La unidad de infantería de marina que está siendo investigada es la misma que está implicada en el asesinato de 24 civiles en Haditha, en 2005.
El Departamento de Justicia anunció que pedirá la pena de muerte si un ex soldado es hallado culpable de cometer una violación y varios asesinatos en la localidad iraquí de Mahmoudiya el año pasado. Steven Green está acusado de violar y asesinar a Abeer Kassem Hamza al-Janabi, de catorce años de edad, y de asesinar a sus padres y a su hermana de cinco años. Dos soldados ya fueron condenados a prisión por su implicación en el caso.
En otras noticias de Irak, el gabinete de ese país aprobó parte de una controvertida ley sobre petróleo. El martes, los ministros decidieron mediante una votación enviar la ley al Parlamento. Los legisladores estadounidenses habían exigido que Irak aprobara la medida como condición para autorizar más fondos para la guerra. Los críticos dicen que la ley permitirá que las empresas extranjeras controlen las reservas petrolíferas de Irak.
El periodista de la BBC Alan Johnston fue liberado, tras haber permanecido casi cuatro meses en cautiverio en la Franja de Gaza. A Johnston se lo liberó luego de un acuerdo no revelado entre el gobierno de Gaza —liderado por Hamas— y sus captores. Horas después de su liberación, el periodista habló desde las oficinas en Gaza del líder de Hamas, Ismail Haniyeh.
En otras noticias de los Territorios Ocupados, cinco combatientes palestinos murieron debido al más reciente ataque de las Fuerzas Armadas de Israel, en el que soldados y tanques israelíes atacaron el campo de refugiados al-Barij, en el centro de Gaza. Y en Cisjordania, las tropas israelíes le dispararon de muerte a un adolescente palestino de quince años, al confundirlo con un hombre armado porque llevaba un arma de juguete.
Mientras tanto, trabajadores del gobierno palestino recibieron sus salarios íntegros por primera vez en diecisiete meses. Se les negó el pago a casi 140.000 empleados desde que Estados Unidos e Israel impusieron un boicot internacional al gobierno de Hamas, que había sido electo democráticamente. La semana pasada Israel comenzó a liberar parte de los ingresos por concepto de impuestos al Presidente palestino Mahmoud Abbas, quien se niega a pagar los sueldos a 19.000 trabajadores del gobierno aliados a Hamas.
Irán renovó su pedido de mantener negociaciones con Estados Unidos. El miércoles, el Viceministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araghci, habló durante una visita a Sudáfrica.
En El Salvador, las fuerzas del gobierno están siendo acusadas de una ofensiva contra una protesta en oposición a la privatización del agua. El lunes, la policía salvadoreña abrió fuego y lanzó gases lacrimógenos en una manifestación organizada por la Asociación de Comunidades Rurales para el Desarrollo de El Salvador (CRIPDES). Trece personas fueron arrestadas, entre ellas cuatro líderes de la CRIPDES.
En California, los compromisos ampliamente publicitados del gobernador Arnold Schwarzenegger están siendo cuestionados, tras la salida de dos altos miembros de la junta de calidad del aire del Estado. La directora de la junta Catherine Witherspoon renunció esta semana, en medio de acusaciones de que Schwarzenegger interfirió en varias oportunidades en los intentos de imponer reducciones a las emisiones de la industria. La renuncia de Witherspoon surge apenas días después de que Schwarzenegger despidió al presidente de la junta, Robert Sawyer. Schwarzenegger dijo que Sawyer no impuso las reducciones de emisiones con suficiente rapidez, aunque Sawyer afirma que el gobernador estaba de hecho intentando retrasarlo. Witherspoon dijo que la acusación de que ella y Sawyer eran responsables de retrasar la reducción de las emisiones es “orweliana”.
Y por último, en Nueva York, el activista ambientalista Daniel McGowan fue a prisión para comenzar a cumplir su condena de siete años. McGowan fue procesado por participar en dos incendios provocados en Oregon en 2001. El juez falló que uno de los incendios era un acto de terrorismo, a pesar de que nadie salió herido en ninguna de las acciones. McGowan fue entrevistado por Democracy Now el mes pasado.