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En 1964, Nelson Mandela fue condenado a pasar el resto de su vida en la cárcel de Robben Island. Se convirtió en el preso político más famoso del mundo y su liberación fue una demanda central del movimiento internacional contra el apartheid. A pesar de la creciente presión internacional en la década de 1980, el gobierno del apartheid recibió un fuerte apoyo de los gobiernos de Reagan y Margaret Thatcher en Gran Bretaña. Ambos países consideraban al Congreso Nacional Africano una organización terrorista. Mandela estuvo en la lista estadounidense de vigilancia de terroristas hasta 2008. Hablamos con Randall Robinson, fundador y ex presidente de la organización TransAfrica. Participó en la fundación del Movimiento por una Sudáfrica Libre y fue detenido muchas veces durante la década de 1980 en manifestaciones contra el régimen del apartheid.
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