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Mientras la ciudad de Denver enfrenta una serie de casos de brutalidad policial, un jurado federal otorgó una compensación histórica de $ 4,6 millones de dólares por daños a la familia de un predicador sin casa, que fue asesinado mientras se encontraba en una de las oficinas de la cárcel de Denver. Marvin Booker falleció cuando un grupo de agentes lo agarraron, se le tiraron encima, lo esposaron, lo tomaron del cuello y le dieron descargas eléctricas con una pistola taser. El juez de instrucción indicó que se trató de un homicidio, pero los fiscales retiraron los cargos contra los agentes involucrados y las autoridades del departamento del Sheriff de Denver nunca los sancionaron, por considerar que Booker podría haber lastimado a alguien y que fue aplicar esa fuerza para controlarlo. El caso pone de relieve una historia de supuesto mal comportamiento por parte del departamento de policía y suma tensión a los pedidos de reforma tanto a nivel local como a nacional, tras los pedidos de justicia por el asesinato del adolescente Michael Brown por parte de un agente de Ferguson. Nos acompañan dos invitados: el reverendo Reginald Holmes, pastor de la Iglesia Cristiana Nuevo Pacto/Ministerios Alfa y Omega que ha sido una de las voces destacada a favor de que las fuerzas de seguridad sean responsables de sus actos. También nos acompaña Susan Greene, periodista de larga trayectoria que trabajaba para periódico The Denver Post y hoy es editora del sitio de noticias The Colorado Independent.