El acuerdo internacional para contener el conflicto al este de Ucrania está en peligro, con ambas partes culpándose entre sí. Los separatistas pro-rusos mantienen el control de varios edificios de gobierno que han incautado en las últimas dos semanas. Estados Unidos afirma que seguirá responsabilizando a Rusia e impondrá nuevas sanciones “en cuestión de días” si los separatistas no se retiran. En Washington, la portavoz del Departamento de Estado dijo que el Secretario de Estado John Kerry ha transmitido una nueva advertencia a Rusia.
Jen Psaki expresó: “El gobierno de Ucrania presentó un proyecto de ley que establece una amplia amnistía para que los separatistas entreguen edificios y armas, envió a altos representantes hacia el este con la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) a fin de implementar el acuerdo y solicitó una pausa por Pascuas en sus operaciones antiterroristas. Pide ahora que Rusia demuestre un nivel de compromiso equivalente para con el acuerdo de Ginebra, tanto en su retórica como en sus acciones, como se recalcó en Ginebra, sin implementación, la declaración conjunta es sólo un trozo de papel; lo que se necesita es una disminución real en la escalada”.
Rusia ha rechazado las declaraciones de Estados Unidos, afirmando que pretende que Ucrania controle a los militantes de derecha responsabilizados por un mortal ataque contra un puesto de control separatista perpetrado durante el fin de semana.