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El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, enfrenta amplias críticas por haber elegido a David Friedman como próximo embajador ante Israel. Durante años, Friedman se desempeñó como presidente de la organización American Friends of Beit El Institutions, que recaudó millones de dólares para apoyar los asentamientos israelíes ilegales en la zona ocupada de Cisjordania. Friedman, que no cuenta con experiencia diplomática, también trabajó como abogado especialista en quiebras para Trump en los últimos quince años. Además, David Friedman apoya los asentamientos para judíos exclusivamente en Cisjordania impulsados por Israel y dice que no cree que sea ilegal que Israel anexe todo el territorio palestino, a pesar de que tal medida sería una flagrante violación al derecho internacional. Durante la campaña presidencial, Friedman también dijo que se oponía a la solución del conflicto con la coexistencia de los dos estados de Israel y Palestina.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que les hicimos (en inglés) a Rebecca Vilkomerson y Mustafa Barghouti. Vilkomerson es directora ejecutiva de la organización Jewish Voice for Peace y Barghouti es titular de la organización Palestinian National Initiative y miembro del Concejo Legislativo Palestino.
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