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Los ambientalistas lograron una gran victoria en California, estado que será libre de energía nuclear y al hacerlo, pondrá fin a una historia de más de medio siglo de energía atómica. El martes, una de las empresas prestadora de servicios más grandes del estado aceptó una propuesta apoyada por grupos ambientalistas y sindicatos, destinada a cerrar Diablo Canyon, la última planta de energía nuclear en funcionamiento en California, para el año 2025. California es la sexta economía más grande del mundo y fue uno de los primeros estados que adoptaron la energía nuclear en la década de 1950. Diablo Canyon empezó a funcionar en el año 1985 y suscitó polémica desde el inicio. Durante años, los activistas contrarios a la energía nuclear pidieron el cierre de la planta, por considerar que no era segura al estar ubicada en una zona peligrosa, próxima a varias falla geológicas. Hablamos con Damon Moglen de la organización Friends of the Earth, que ha luchado a favor del cierre de la planta desde la década de 1960.