Después del primer debate presidencial del lunes por la noche, el candidato presidencial republicano Donald Trump ha comenzado a criticar a todo el mundo, desde el moderador Lester Holt a una exganadora del concurso de belleza Miss Universo. En declaraciones a Fox News el martes, Trump acusó a Holt de hacerle “preguntas injustas”. También reiteró sus críticas a la ex Miss Universo Alicia Machado, a quien Clinton había mencionado durante el debate del lunes de noche.
Donald Trump dijo: “Cuando [Clinton] mencionó a la persona que se convirtió en… Conozco a esa persona, ella era una Miss Universo. La peor que hemos tenido. Absolutamente la peor. Era imposible. Era concursante de Miss Universo y terminó ganando, y ella les hizo pasar un momento tremendamente difícil. Era la ganadora y aumentó una gran cantidad de peso, y fue un verdadero problema. Tuvimos un verdadero problema”.
Ese era Donald Trump, en declaraciones a Fox News. En respuesta, Alicia Machado atacó a Donald Trump en una entrevista con The Guardian, donde también relató que las críticas de Trump le provocaron trastornos de la alimentación.
Alicia Machado expresó: “Tras ese episodio estuve enferma por casi cinco años con anorexia, bulimia, trastornos de la alimentación. Yo conozco muy bien a esta persona, sé lo que él puede hacer. Esto es más que un programa de reality. Esto no es un programa de reality”.
Esa era Alicia Machado. Ahora trabaja para la campaña de Hillary Clinton. Donald Trump también llevó cámaras al gimnasio para mostrarla mientras hacía ejercicio. Tras el debate, Donald Trump también declaró a la cadena ABC que lamentaba no haber comentado las infidelidades conyugales de Bill Clinton.
Trump declaró: “Pude hablar de todo lo que quería, excepto de las transgresiones de Bill. Ella está gastando cientos de millones de dólares en comerciales que son mentiras. Pero yo no quería hacerlo por Chelsea, a quien considero una joven maravillosa. No quise decir lo que iba a decir con Chelsea en el lugar”.
Donald Trump previamente había dicho que podría llevar a Gennifer Flowers para que se sentara en la primera fila del debate. Flowers tuvo un romance con Bill Clinton en la década de 1970. La campaña de Trump dijo más adelante que Flowers no había sido invitada y que no iba a asistir.
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