El jueves, frente a la Casa Blanca, los manifestantes que expresaban su rechazo al proyecto de cuidado de salud de los republicanos no cumplieron con la orden de la policía de desalojar una vereda y fueron arrestados.
Adanjesús Marín afirmó: “24 personas fueron arrestadas: representan a los 24 millones de estadounidenses que perderán su seguro de salud si derogan la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio”.
Kerri Evelyn Harris sostuvo: “Queremos asegurarnos de que 24 millones de personas no se queden sin cobertura de salud y que el nuevo plan de cuidado de la salud no funcione como beneficio fiscal para los adinerados y se olvide de los pobres nuevamente”.
Tanetta Wilson dijo: “Para hacer que la atención médica sea accesible a las personas de bajos ingresos, para los ciudadanos más ancianos, para que los medicamentos sean accesibles a la gente; para eso estamos aquí”.
La protesta se produjo luego de que la Oficina de Presupuesto del Congreso publicara un cálculo estimado del impacto que tendría el nuevo plan de salud de los republicanos y concluyera que 24 millones de personas quedarían sin seguro de salud y además que el déficit se reduciría solo en 150 mil millones de dólares en los próximos diez años. Esto representa una cifra mucho menor al tercio de billón de dólares de reducción de déficit que preveía el plan original.