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Veintidós millones de estadounidenses perderían su seguro médico en la próxima década, conforme al proyecto de ley republicano del Senado sobre el cuidado de la salud. Esto es según la Oficina de Presupuesto del Congreso, que dio a conocer su evaluación el lunes. Tras el informe, los senadores republicanos Susan Collins, de Maine, y Rand Paul, de Kentucky, se sumaron al senador Dean Heller, de Nevada, en su compromiso de votar en contra de siquiera discutir el proyecto de ley de salud presentado por su partido esta semana. Los líderes republicanos habían estado presionando para que se hiciera una votación hoy, antes del receso del 4 de julio. El lunes, La Asociación Médica Estadounidense se pronunció en contra del proyecto del Senado mediante una carta dirigida a los líderes del Senado. En la carta señalan que “La medicina hace mucho funciona conforme el precepto Primum non nocere o ‘ante todo, no hacer daño’. El proyecto de ley viola ese precepto en muchos niveles”.
Para saber más de este tema, hablamos con la Dra. Steffie Woolhandler. Woolhandler es profesora de la Universidad CUNY-Hunter y médica de atención primaria. Además es profesora en la Facultad de Medicina de Harvard y cofundadora de Médicos por una Programa de Salud Nacional.
Transcripción
AMY GOODMAN: Veintidós millones de estadounidenses perderían su seguro de salud en los próximos 10 años bajo la nueva ley sanitaria del grupo republicano del Senado. Además, Medicaid vería un recorte de 772.000 millones de dólares en la próxima década, mientras que los estadounidenses más ricos disfrutarían de 541.000 millones de dólares en recortes de impuestos. Son datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso, que dio a conocer su evaluación de la ley de salud republicana en el Senado. Tras la publicación del informe de la oficina, los senadores republicanos Susan Collins de Maine y Rand Paul de Kentucky se unieron al senador Dean Heller, de Nevada, en su promesa de oponerse incluso a debatir la reforma sanitaria de su partido esta semana. El senador Ron Johnson de Wisconsin ha sugerido que él también se opondría a la votación del proyecto de ley. Los líderes republicanos habían estado presionando para celebrar una votación esta semana, antes del receso del 4 de julio. El proyecto de ley republicano también enfrenta una importante oposición de todos los demócratas del Senado, una multitud de gobernadores de ambos partidos, la mayoría de la industria de la salud, hospitales, personal médico y de enfermería, grupos de defensa de los pacientes, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, e incluso miembros de la extrema derecha como la red política de los hermanos Koch, quienes afirman que la legislación no es lo suficientemente conservadora. Este es el senador por Vermont, Bernie Sanders, hablando el lunes en el pleno del Senado.
SEN. BERNIE SANDERS: Señor presidente, el análisis de la Oficina del Presupuesto del Congreso sobre la ley sanitaria Trump-McConnell nos da 22 millones de razones por las que esta legislación no debería ver la luz del día. Lo que nos dice la oficina, en esencia, es que este proyecto de ley realmente no tiene nada que ver con la asistencia sanitaria. Más bien, es una enorme transferencia de riqueza de los enfermos, los ancianos, los niños, los discapacitados y los pobres a los bolsillos de las personas más ricas de este país. Sr. presidente, según el informe que Oficina del Presupuesto del Congreso que acaba de salir hace unas horas, este proyecto de ley dejaría a 22 millones de estadounidenses sin cobertura sanitaria, recortaría los fondos de Medicaid en más de 770.000 millones de dólares, retiraría la financiación para Planned Parenthood y aumentaría sustancialmente el coste de los seguros para los estadounidenses de mayor edad. Señor presidente, de hecho, se trata de una ley inhumana e inmoral.
AMY GOODMAN: El lunes, la Asociación Médica Estadounidense (AMA) se mostró en contra del proyecto de ley del Senado. En una carta dirigida a los líderes del Senado, la AMA escribió: “La medicina ha operado durante mucho tiempo bajo el precepto de “primum non nocere”, o “primero, no hacer daño”. El proyecto de ley viola ese principio en muchos niveles “. Mientras tanto, un sorprendente nuevo estudio de la revista Annals of Internal Medicine está estimando que unas 28.600 personas podrían sufrir muertes prematuras si perdieran su cobertura médica. No acompaña la autora de ese estudio, la Dra. Steffie Woolhandler, profesora de la universidad CUNY-Hunter College, médica de atención primaria, profesora en la Escuela Médica de Harvard y cofundadora de Médicos para un Programa de Salud Nacional. Bienvenida a Democracy Now!
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Es un placer.
AMY GOODMAN: Cuéntenos lo que descubrió.
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Hemos repasado la literatura científica mundial sobre la relación entre cobertura de salud y mortalidad. Ahora existe un consenso científico sobre el hecho de que no tener seguro médico eleva la tasa de mortalidad. Aumenta la tasa de mortalidad entre 3 y un 29 %. Y la matemáticas detrás de eso es que si usted le quita el seguro de salud a 22 millones de personas, unas 29.000 de ellas morirán cada año, anualmente, como resultado de ello. Eso es lo que encontramos al revisar la literatura. Hubo una conclusión similar en el New England Journal of Medicine. Publicamos nuestro estudio en la revista Annals of Internal Medicine, que es el órgano oficial del Colegio Estadounidense de Médicos, la sociedad de especialidades médicas más grande de la nación. Por lo tanto, estar sin seguro eleva su tasa de mortalidad. Eso es un consenso científico establecido. Y muchos republicanos han estado tratando de decir: “Puedes dejar sin seguro de salud de 22 millones de personas, y nada sucederá “. Eso está totalmente refutado por el consenso científico.
AMY GOODMAN: Explique cómo mueren las personas como resultado [de no tener seguro].
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Bueno, la gente podría tener una enfermedad grave, como un traumatismo importante por haber sido golpeado por un coche, que le obligue a ir al hospital. Si no tiene seguro y tiene un traumatismo importante, sus índices de mortalidad son más altos. O podría tener una enfermedad como el cáncer de mama. Si no tiene seguro y tiene cáncer de mama, sus índices de mortalidad son más altos. Pero sobre todo esto tiene que ver con esa atención médica de rutina para tratar la presión arterial alta, o para tratar la diabetes antes de que causen complicaciones, para prevenir esas serias complicaciones y muertes. Parece que la hipertensión, la presión arterial alta, es probablemente el mayor causa individual de las muertes entre personas no aseguradas. Se necesitan medicamentos para controlar la presión arterial alta, para prevenir accidentes cerebrovasculares, ataques cardíacos, o la muerte.
AMY GOODMAN: Así que este es el número: 22 millones de personas perderán su seguro de salud en los próximos 10 años. Y luego sólo empeorará aún más.
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Bueno, según la Oficina de Presupuesto del Congreso sí, desde ahí sigue aumentando, porque los recortes de Medicaid en el proyecto de ley del Senado se han aplazado, pero son muy, muy profundos. Son aún más profundos a largo plazo que lo que planea el proyecto de ley de la Cámara. Por lo tanto, Medicaid va a ser recortado no sólo para la gente pobre, sino también para las personas en hogares de ancianos. Como sabe, la mayoría de la gente que está en un asilo de ancianos acaba dependiendo de Medicaid para pagar las facturas, porque las casas de ancianos toman todo su dinero, y sólo les queda Medicaid. Si tiene un hijo discapacitado, depende de Medicaid. Si tiene parientes con una grave enfermedad mental o abuso de sustancias, ellos van a depender de Medicaid. Así que esta propuesta toma el dinero de todas estas personas, no sólo los pobres, para dar este gigantesco recorte de impuestos al 1 % más rico de los contribuyentes.
AMY GOODMAN: Quisiera referirme a un comentario hecho por el el congresista republicano por Idaho, Raúl Labrador, durante una asamblea pública el mes pasado. Labrador creo polémica tras su respuesta a esta pregunta de un miembro de la audiencia.
MIEMBRO DEL PÚBLICO: Usted está obligando a las personas bajo Medicaid que acepten morir. Están haciendo un mandato que matará a la gente.
RAÚL LABRADOR: No, nadie quiere que la gente muera. Esa argumento es indefendible. Nadie muere porque no tener acceso a asistencia sanitaria.
AMY GOODMAN: “Nadie muere por no tener acceso a asistencia sanitaria “. ¿Dr. Steffie Woolhandler?
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Bueno, Raúl Labrador lo dijo. El Senador Ted Cruz lo ha dicho. Marco Rubio lo ha dicho. El secretario Tom Price, secretario de salud y servicios humanos, ha sugerido que, que se puede estar sin seguro y que no pasa nada. Eso simplemente no es cierto. La ciencia nos está mostrando que quien carece de seguro médico no recibe el cuidado que necesita para mantenerse saludable, y que la gente muere más pronto como resultado de eso. Y creo que los republicanos reconocen que la idea de que la gente va a morir por su comportamiento es muy peligrosa para ellos, Pero eso es lo que dice el consenso científico.
AMY GOODMAN: Entonces, ¿qué tiene que pasar ahora?
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Bueno, ahora mismo, las casas de apuestas están diciendo que la probabilidad está al 50/50 de que esta propuesta del Senado sea aprobada. Así que cuando algo está al 50/50, significa que ahora es el momento de movilizarse. Podemos llamar a nuestro senador, podemos llamar a nuestro congresista. Podemos manifestarnos. Esta habiendo manifestaciones por todo el país contra este proyecto de ley. Podemos twittear sobre el tema. Podemos hablar a nuestros amigos. Ahora es el momento de activarnos realmente con este tema. También tenemos que decir: “Vamos a avanzar hacia el sistema pagador único, para proteger a todos, en lugar de ir hacia atrás con esta derogación “. Como sabe, incluso bajo la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio, 28 millones de estadounidenses no tienen seguro de salud. Muchos estadounidenses no tienen cobertura suficiente, o tienen un seguro que no pueden permitirse el lujo de usar debido a lagunas de cobertura como copagos, deducibles y servicios no cubiertos. Así que tenemos que luchar contra este paso hacia atrás de los republicanos, pero también decir a nuestros legisladores demócratas que necesitamos avanzar hacia el sistema pagador único. Que es lo que realmente mejorará la atención para todos los estadounidenses.
AMY GOODMAN: Usted nunca fue una defensora del Obamacare. Y ahora, ¿qué pasará? Quiero decir, incluso si no se realiza la votación, el desmantelamiento de la sanidad, de la cobertura sanitaria, avanza hoy en día a toda velocidad. Por lo que, ¿qué perspectivas existen incluso si este proyecto de ley no consigue avanzar?
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Bueno, existe más apoyo para la idea de Medicare para todos, el sistema de pagador único, que nunca antes en la historia. Las encuestas muestran que un 56 % del pueblo estadounidense apoya la idea. La mayoría de los demócratas de la Cámara han aprobado el proyecto de ley Conyers, número HR 676, sobre un Medicare para todos. Más de la mitad de los demócratas de la Cámara de Representantes han apoyado este proyecto de ley, alrededor de 112. El senador Sanders está presentando un proyecto de ley al Senado al respecto. Así que este es un buen momento para que la gente diga: “Necesitamos avanzar del cuidado de salud a bajo precio al sistema de pagador único”.
AMY GOODMAN: ¿Y cómo sería un sistema de Medicare para todos?
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Bueno…
AMY GOODMAN: ¿Cómo pasaría eso?
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Bueno, sería un Medicare ampliado y mejorado para todos. se obtendría una tarjeta Medicare desde el nacimiento, y se conservaría toda la vida. Todos los cuidados médicos necesarios estarían cubiertos por el programa Medicare para todos, financiando mediante impuestos. Eso sería mucho más barato a largo plazo, porque se ahorraría mucho dinero en gastos administrativos. Toda la facturación y el registro de seguros son extremadamente caros en Estados Unidos, consumen el 31 % del gasto total en salud del país, según nuestra investigación, que ha aparecido en el New England Journal of Medicine. Al ir a un sistema de pago único, podríamos ahorrar sobre la mitad de eso, unos 500.000 millones de dólares al año, que podríamos utilizar para alcanzar la atención sanitaria universal y eliminar los copagos y deducibles de las personas que ahora los tienen. Eso es lo que ha sucedido en otros países. Canadá tiene un sistema de pagador único. El sistema no funciona a la perfección, pero sí cubre a todos. Escocia tiene un sistema de pagador único. Gran parte de Europa occidental tiene sistemas de pagador único. Cubren a todos sus ciudadanos. Viven una media de dos años más. Ellos pagan menos por la atención médica que nosotros.
AMY GOODMAN: Bueno, esto es importante, porque usted habló de mortalidad, y si este proyecto de ley pasara y se convirtiera en ley, cerca de 29.000 personas al año podrían morir. Más estadounidenses podrían morir. ¿Qué tasa de mortalidad tenemos con nuestro actual sistema de salud en comparación con otros países?
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Bueno, los estadounidenses vivimos de dos a tres años menos que las personas de Canadá, justo al otro lado de la frontera. Así que, a pesar de tener una cultura y estilo de vida similares vivimos dos años menos. Del mismo modo, vivimos unos dos años menos que la gente de muchos países de Europa Occidental. Y algunos de los estudios que revisamos para nuestro artículo estudian esta evidencia internacional que es totalmente coherente con la idea de que no tener cobertura sanitaria es malo para la salud y puede causar más muertes. Y que el estar totalmente cubierto para todos los cuidados y médicamente necesarios, como sucedería bajo sistema de Medicare para todos, nos volvería más sanos y prolongaría nuestra vida.
AMY GOODMAN: Quería pasar al presidente Trump que fue entrevistado recientemente por Peter Hegseth en el programa Fox & Friends.
PRESIDENTE DONALD TRUMP: Porque lo quiero ver, y hablo desde el corazón, eso es lo que quiero ver. Quiero ver un proyecto de ley con corazón.
AMY GOODMAN: ¿Su respuesta?
DR. STEFFIE WOOLHANDLER: Bueno, Trumpcare no tiene corazón alguno. El proyecto de ley de la Cámara iba a dejar a 23 millones de personas sin seguro. Con el proyecto de ley del Senado serían 22 millones en 10 años para luego seguir deshaciéndose de mas. También quieren hacer peor el seguro para personas con cobertura privada deshaciéndose de las reglas sobre lo que tiene que ser cubierto, por lo que su seguro privado ya no tendrá que cubrir cosas como la atención por maternidad. En realidad, están robando dinero del fondo fiduciario de Medicare, están tomando 117.000 millones de dólares del fondo fiduciario de Medicare, que es lo que paga el seguro de salud cuando la gente cumple 65 años. 117.000 millones de dólares que se sacan de ese fondo para dar reducciones de impuestos al 1 % más rico de los contribuyentes. Eso no es tener corazón. Eso es lo contrario a tener corazón.
AMY GOODMAN: Bueno, muchas gracias por estar con nosotros, Dra. Steffie Woolhandler, profesora del CUNY-Hunter College aquí en Nueva York, médica de atención primaria, profesora en la Escuela de Medicina de Harvard, cofundadora de Médicos para un Programa de Salud Nacional. Vamos a enlazar su informe sobre la mortalidad que estaría relacionada con la reforma del sistema de salud de los republicanos. Un proyecto de ley que quiere convertirse en ley y por el que podrían morir aproximadamente unos 28.600 estadounidenses más cada año. Seguimos en Democracy Now! A la vuelta, una decisión del Tribunal Supremo. Quédense con nosotros.