El martes, en Washington DC, miembros del Bloque Afroestadounidense del Congreso revivieron las convocatorias para la remoción de los monumentos confederados de los pasillos del Congreso. Por otra parte, las autoridades de Baltimore retiraron por lo menos dos estatuas confederadas de la noche a la mañana, después de que los manifestantes cubrieran con pintura roja el monumento de la ciudad llamado “Soldados y marineros” y de que el concejo municipal de Baltimore votara el lunes por unanimidad su retiro.
Brandon Scott, miembro del concejo municipal de Baltimore, expresó: “Las personas representadas en estos monumentos fueron traidores a Estados Unidos de América, y no deberíamos homenajear a los traidores con monumentos en ninguna parte de nuestro país. Los grupos de ‘derecha alternativa’ y grupos marginales en todo el país, que están propagando un racismo vil, están usando estos monumentos como faros de luz. Y no deberíamos ser parte de eso”.
En Memphis, Tennessee, una multitud unió sus brazos el martes para rodear un monumento al ex presidente confederado Jefferson Davis, exigiendo que se retire la estatua.