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Según se informa, el Gobierno de Trump evalúa reanudar la política de separación forzada de las familias a lo largo de la frontera entre México y Estados Unidos. La medida se tomaría, a pesar de que no está claro el número total de personas separadas la última vez que se implementó esta práctica ampliamente condenada. Un nuevo informe realizado por Amnistía Internacional sugiere que los agentes de inmigración separaron a unas seis mil familias entre los meses de abril y agosto. Este es un número de niños y padres separados mucho mayor al que se pensaba. Funcionarios del Gobierno de Trump actualmente analiza detener juntos a los miembros de las familias que solicitan asilo por un período de hasta veinte días. Luego obligaría a los padres a elegir entre permanecer detenidos juntos durante meses o años mientras los casos de inmigración avanzan o permitir que sus hijos vayan a centros de acogida del Estado donde sus familiares u otras personas pueden pedir la custodia.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que le hicimos (en inglés) a Lee Gelernt. Gelernt es director adjunto del Proyecto para los Derechos de los Inmigrantes, de la Unión Estadounidense para las Libertades Civiles (ACLU), y abogado de la campaña nacional de ACLU contra la separación de las familias implementada por el Gobierno de Trump.