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El terrorismo local arrasó Estados Unidos la semana pasada cuando un hombre blanco armado ingresó a una tranquila sinagoga de Pittsburgh y asesinó a once personas. Muchos creen que se trata del ataque antisemita más trágico de la historia estadounidense. El ataque se produjo un día después de que detuvieran a un ferviente simpatizante de Trump en Florida y lo acusaran de haber enviado bombas a más de una decena de reconocidos opositores al presidente, y tres días después de que un hombre blanco armado atacara a tiros y asesinara a dos afroestadounidenses en un supermercado tras intentar ingresar a una iglesia negra y no lograrlo.
Para saber más de este tema, puede ver la conversación que mantuvimos (en inglés) con Lois Beckett. Beckett es periodista de The Guardian y escribe sobre políticas de portación de armas de fuego, la justicia penal y la ultra derecha en Estados Unidos. “El atacante de Pittsburgh no era solo un antisemita”, dice Beckett. “Se radicalizó con la ideología de los supremacistas blancos”.
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