Un informe recientemente desclasificado revela que la CIA consideró la posibilidad de utilizar la droga conocida como “suero de la verdad” para interrogar a los sospechosos de terrorismo tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. El informe, que se dio a conocer el martes, detalla un programa de investigación llamado “Proyecto Medicación”, en el que la CIA trabajó con profesionales de la salud que finalmente decidieron no solicitar autorización al Departamento de Justicia de Estados Unidos para utilizar ese tipo de drogas. El abogado Dror Ladin, de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés), sostiene que el programa incitaba a los médicos a violar el Juramento Hipocrático de “no causar daño”, y recuerda que la CIA tiene un historial de experimentar con drogas con los detenidos.
Dror Ladin afirmó: “La CIA drogaba a las personas con LSD sin su conocimiento. Les inyectaban barbitúricos sin su conocimiento. Y lo mismo sucedía en el bloque soviético. Y cuando la gente se enteró de esto en audiencias realizadas ante el Senado en los años 70, la CIA fue tremendamente criticada y prometió no volver a hacerlo nunca más, por lo que se impusieron todas estas prohibiciones. Y 30 años después, la CIA consideró utilizar nuevamente estos métodos. Y de una manera muy retorcida, algunos médicos se convencieron a sí mismos de que si encontraban el suero de la verdad, podrían dejar de torturar a las personas y, en lugar de ello, solo les inyectarían drogas sin su conocimiento”.