“Las guerras comerciales son buenas y fáciles de ganar” es el mensaje que el presidente Trump publicó en su cuenta de Twitter el viernes. Esto provocó conmoción y temor en todo el mundo ante la inminente volatilidad económica. El jueves, los mercados de valores del mundo entero cayeron después de que Trump anunciara su plan para imponer nuevos aranceles a las importaciones de acero y aluminio. Los nuevos aranceles, veinticinco por ciento al acero y diez por ciento al aluminio, beneficiarán a los productores estadounidenses de metales, mientras aumentarán los precios para las empresas que fabrican desde autos y aviones hasta torres de departamentos. Destacados republicanos y líderes empresariales denunciaron el plan de Trump, al afirmar que los aranceles perjudicarán la industria manufacturera y la competitividad estadounidense. El anuncio de Trump también generó la preocupación de que otros países impongan aranceles en carácter de represalia y cuestionen el proteccionismo estadounidense ante la Organización Mundial del Comercio.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que les hicimos (en inglés) a Lori Wallach y Michael Hudson. Wallach es directora del Observatorio de Comercio Global (Global Trade Watch) perteneciente a la organización Public Citizen. Es autora del libro “The Rise and Fall of Fast Track Trade Authority” (El surgimiento y la caída de la Autoridad de Promoción Comercial de Vía Rápida). Hudson es economista y autor del libro “America’s Protectionist Takeoff 1815-1914” (El despegue del proteccionismo de Estados Unidos: 1815-1914).