En el Capitolio de Washington DC, Christopher Wylie, informante de Cambridge Analytica, afirmó el miércoles ante la comisión judicial del Senado estadounidense que la empresa de análisis de votantes intentó reducir la concurrencia de los votantes afroestadounidenses, basándose en prejuicios raciales. Wylie testificó que Cambridge Analytica recogió los datos de hasta 87 millones de usuarios de Facebook sin su autorización y los utilizó para “librar una guerra cultural”. El fundador de Cambridge Analytica fue el multimillonario Robert Mercer, y uno de sus principales estrategas fue Steve Bannon, exasesor del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y director del medio derechista Breitbart News. Wylie sostuvo que abandonó la empresa debido a los esfuerzos por desalentar a los votantes, especialmente a los afroestadounidenses.
Christopher Wylie afirmó: “Cambridge Analytica intentó identificar características mentales y emocionales en determinados sectores de la población estadounidense, y trabajó para explotarlas de forma tal que activaran algunas de las peores vulnerabilidades en las personas, como la neurosis, la paranoia y los prejuicios raciales. Que quede claro: el trabajo de Cambridge Analytica no equivale al trabajo tradicional de marketing. Cambridge Analytica se especializaba en desinformar, esparcir rumores, recoger información comprometedora y difundir propaganda”.