Titulares20 de junio de 2018

La indignación y las protestas a lo largo de Estados Unidos van en aumento ante la práctica del gobierno encabezado por el presidente Donald Trump de separar por la fuerza a niños inmigrantes de sus padres en la frontera entre Estados Unidos y México, una medida que constituye una violación de las leyes internacionales de derechos humanos. El martes, los gobernadores republicanos y demócratas de ocho estados –Maryland, Massachusetts, Virginia, Rhode Island, Colorado, Nueva York, Carolina del Norte y Connecticut– declararon que retendrían o retirarían a sus tropas de la Guardia Nacional de la frontera, en protesta por la práctica de separar a los niños inmigrantes de sus padres y madres.

La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos afirma haber separado a más de 2.300 niños inmigrantes de sus familias en los últimos dos meses. La revista electrónica The Intercept informa que el gobierno del presidente Donald Trump ha separado al menos a 3.700 niños inmigrantes de sus padres desde octubre, muchos de los cuales llegaron a Estados Unidos en busca de asilo. Los niños que fueron separados de sus padres fueron enviados a centros de detención distribuidos en al menos 17 estados.

La agencia de noticias The Associated Press informa que bebés y niños pequeños están siendo detenidos en al menos tres instalaciones –a las que se conoce con el nombre de “cárceles para bebés”– en el sur del estado de Texas, en las ciudades de Brownsville, Raymondville y Combes, y que está programado inaugurar una cuarta próximamente en la ciudad de Houston. El gobierno los llama “refugios para personas de corta edad”. Muchos de los niños que permanecen en esos centros tienen menos de un año de edad.

El martes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, continuó su diatriba xenófoba en la red social Twitter, donde escribió: “Los demócratas son el problema. No les importa el crimen y quieren que los inmigrantes ilegales, sin importar cuán malos puedan ser, inunden e infesten nuestro país”. Por su parte, el editor conservador Bill Kristol tuiteó: “La declaración de Trump de que los inmigrantes ‘infestarán nuestro país’ probablemente suene mejor en el alemán original”. Las siguientes son declaraciones emitidas por Donald Trump el martes.

Donald Trump expresó: “Cuando los países abusan de nosotros enviando a su gente –y no a sus mejores ciudadanos– no vamos a enviarles más ayuda. ¿Por qué diablos deberíamos hacerlo?”.

Ante las acusaciones de que Donald Trump mantiene como rehenes a niños refugiados a fin de obtener fondos para la construcción del muro fronterizo en la frontera con México, el presidente de Estados Unidos se reunió el martes con los legisladores republicanos en el Capitolio, en Washington DC. Los miembros republicanos de la Cámara de Representantes prometen apoyar con sus votos esta semana a dos arrasadores proyectos de ley antinmigrantes. El presidente Trump anunció que suspenderá la práctica de separación de las familias inmigrantes en la frontera con México a cambio de que se le otorguen 25.000 millones de dólares para destinar a la construcción del muro fronterizo y de que se lleve a cabo una campaña represiva contra los solicitantes de asilo y una reducción del otorgamiento de visas para ingresar a Estados Unidos. Al parecer, ningún legislador republicano le planteó a Trump el problema de la separación de las familias de inmigrantes durante la reunión que tuvo lugar el martes. Los demócratas exigen la aprobación de una legislación independiente para detener la separación de las familias, o que el propio presidente Trump deje sin efecto esa práctica, ya que fue su gobierno el que promulgó la política de “tolerancia cero” que comenzó con la separación generalizada de las familias de inmigrantes en la frontera con México.

Cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se retiraba de la reunión con los republicanos en el Capitolio, fue interrumpido por los legisladores del Bloque Hispano del Congreso, que gritaban: “Señor presidente, ¿no tiene hijos?”.

El representante Juan Vargas exclamó: “Señor presidente, ¿no tiene hijos? ¿No tiene hijos, señor presidente?”

También le gritaron “¡Deje de separar a los niños de sus familias!”.

La secretaria de Seguridad Nacional estadounidense, Kirstjen Nielsen, fue abucheada el martes en un restaurante mexicano en la ciudad de Washington DC por manifestantes que le gritaron “Deberías tener vergüenza”.

Manifestante 1: “¿Cómo te hace sentir eso?”

Manifestante 2: “¡Qué vergüenza!”

Manifestante 1: “¡Qué vergüenza!”

Manifestante 2: “¡Vergüenza!”

Manifestante 1: “¿Lo has escuchado? ¿Escuchaste a los bebés llorando?”

Los manifestantes también exclamaban: “¿Ya escuchaste el audio?” y “¿escuchaste a los bebés llorando?”, en referencia al audio publicado por la agencia independiente de noticias ProPublica, en el que se escuchaba a niños inmigrantes separados de sus padres, que permanecían en un centro de detención, llorando por sus padres y decendo “mamá” y “papi”.

Mientras tanto, más de 600 miembros de la Iglesia Metodista Unida presentaron una queja formal contra el fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, miembro de esta iglesia, al que acusan de abuso infantil, inmoralidad y discriminación racial por la práctica del gobierno del presidente Donald Trump de separar a los niños inmigrantes de sus familias. El lunes, Sessions también fue abucheado en la ciudad de Nueva Orleans mientras recibía un premio por una vida de logros en la Asociación Nacional de Sheriffs, donde los manifestantes que se hicieron presentes le gritaban: “Deje de llevarse a los niños”.

Los manifestantes vociferaron: “¡Deje de llevarse a los niños! ¡Deje de llevarse a los niños! ¡Deje de llevarse a los niños! ¡Deje de llevarse a los niños!”

Cinco manifestantes fueron arrestados mientras protestaban frente a la Convención de la Asociación Nacional de Sheriffs mientras dentro del recinto Sessions elogiaba el legado “angloamericano” de esta asociación.

Cientos de manifestantes se congregaron el martes en ciudades de todo Estados Unidos, entre ellas San Francisco, Nueva York, Filadelfia, El Paso, Texas, Washington DC y Portland, Oregon, para denunciar la práctica de separar a los menores migrantes de sus padres. Profesionales de la salud mental continúan denunciando el carácter perjudicial de esta práctica. Las siguientes son palabras de Kathryn Hampton, integrante de Médicos por los Derechos Humanos.

Kathryn Hampton expresó: “El impacto negativo sobre el funcionamiento de los menores puede incluso extenderse hasta la adultez. Puede tener impacto en sus logros académicos, puede tener un impacto a largo plazo en su capacidad de desarrollar un apego normal con sus familiares y seres queridos. La calidad de vida en términos psicológicos resulta devastada”.

Las autoridades mexicanas informan que entre los miles de menores que han sido separados de sus padres en la frontera de Estados Unidos hay una niña de 10 años con síndrome de Down. Estas son palabras del Corey Lewandowski, exdirector de campaña de Trump, quien se burló de la historia de esta niña en la cadena de televisión Fox News. El fragmento comienza con el exasesor principal del Comité Nacional Demócrata, Zac Petkanas.

Zac Petkanas: “Hoy leí sobre una niña de 10 años con síndrome de Down que fue separada de su madre y encerrada en una jaula”

Corey Lewandowski: “Buah, buah”.

Zac Petkanas: “¿Acaba de decirle ‘buah, buah’ a una niña de 10 años con síndrome de Down que fue separada de su madre?

Corey Lewandowski: “Lo que dije es que puede seleccionar cualquier cosa…”

Zac Petkanas: “¿Cómo se atreve?”

Corey Lewandowski: “…pero la conclusión es muy clara”

Zac Petkanas: “¿Cómo se atreve?”

La embajadora de Estados Unidos ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Nikki Haley, anunció que el país se retirará del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y alegó que el comité tiene una postura sesgada en contra de Israel.

Nikki Haley declaró: “Durante demasiado tiempo, el Comité de Derechos Humanos ha protegido a quienes abusan de los derechos humanos y ha sido un pozo negro de prejuicios políticos. Lamentablemente, es evidente que nuestro pedido de que se lleve a cabo una reforma no fue escuchado”.

El anuncio del retiro de Estados Unidos se produjo sólo un día después de que la Oficina de la Alta Comisionada por los Derechos Humanos de las Naciones Unidas criticó al gobierno del presidente Donald Trump por la “inconcebible” práctica de separar a los menores migrantes de sus padres en la frontera con México. El gobierno de Trump ha amenazado durante meses con retirarse de la comité de derechos humanos, que ha condenado a Israel en repetidas ocasiones por el tratamiento que dispensa a los palestinos, incluyendo la sangrienta represión que las fuerzas armadas israelíes llevan a cabo desde fines de marzo contra manifestantes palestinos no violentos en la Franja de Gaza. Estas son las palabras de Philip Alston, relator especial de Naciones Unidas sobre extrema pobreza, hablando en Democracy Now!

Philip Alston expresó: “Si sólo hay ocho países en todo el mundo que no condenan las acciones de Israel, deben preguntarse por qué esos ocho países están en contra de todos los demás. Y esos ocho países son Estados Unidos, Australia y otros seis pequeños, muy pequeños. Básicamente, todos los países de Europa Occidental y todos los aliados de Estados Unidos se unieron en la medida que Naciones Unidas tomó respecto de Israel”.

Esas fueron las palabras de Philip Alston, relator especial de Naciones Unidas sobre extrema pobreza, quien hablará el martes ante el Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas.

En Canadá, el Senado aprobó una legislación para legalizar la marihuana, por lo que pronto será el segundo país del mundo en legalizar esa droga a nivel nacional. El primero fue Uruguay. El periódico The Guardian informa que casi 500.000 canadienses tienen condenas vinculadas con la marihuana en sus antecedentes. Activistas por la justicia penal están promoviendo que aquellos que tengan condenas previas a la nueva legislación reciban una amnistía mientras la nueva ley entra en efecto. Argumentan que las leyes que penalizaban la marihuana, ahora obsoletas, tuvieron un impacto desproporcionado sobre las personas de color y las de bajos recursos económicos.

En Yemen, una coalición liderada por Arabia Saudí y que cuenta con el apoyo de Estados Unidos anunció que tomó el control de la ciudad portuaria de Hudayda, que es crucial para el país. Cientos de combatientes murieron y miles de civiles se vieron obligados a huir de sus hogares desde que, hace una semana, la coalición liderada por Arabia Saudí y que cuenta con el apoyo de Estados Unidos lanzó una ofensiva total contra Hudayda. Diversas organizaciones internacionales advirtieron que la ofensiva, que cuenta con el respaldo de Estados Unidos y se propone tomar el control de Hudayda, agravará la crisis humanitaria que azota Yemen, que actualmente sufre la peor epidemia de cólera en el mundo, por la que hay más de un millón de personas afectadas y millones al borde de la hambruna.

Mientras tanto, la agencia de noticias Associated Press denuncia abusos sexuales generalizados cometidos en una cárcel ubicada al sur de Yemen, que es controlada por los Emiratos Árabes Unidos. El medio informa que el 15 de marzo, los oficiales colocaron en fila a los prisioneros y les ordenaron que se desvistieran para luego registrar sus cavidades anales, alegando que estaban buscando teléfonos celulares que presuntamente habían ingresado de contrabando. Los hombres gritaron y lloraron, y aquellos que se resistieron fueron golpeados y amenazados con perros. Associates Press informa que cientos de detenidos sufren abusos similares.

En Estados Unidos, la ciudad de Charleston, en el estado de Carolina del Sur, se disculpó por su papel en el comercio transatlántico de esclavos. Alrededor del 40% de los africanos esclavizados que fueron llevados por la fuerza a Norteamérica fueron introducidos a través de Charleston. El martes, el ayuntamiento de Charleston aprobó una resolución en la que reconoce que la ciudad prosperó a costa de los esclavos. La resolución fue aprobada en el edificio del ayuntamiento de Charleston, que fue construido por esclavos.