Desde Florida hasta Washington, continúa la huelga nacional de prisiones, que comienza ya su tercera y última semana a lo largo de Estados Unidos. Prisioneros de al menos 13 estados participan en interrupciones laborales, protestas pacíficas, boicots a las tiendas de las cárceles y huelgas de hambre para reivindicar mejores condiciones de vida, mejores remuneraciones por el trabajo realizado por los prisioneros, acceso a la educación, mejores servicios de rehabilitación y el derecho a voto. Estas son declaraciones de Ronald Brooks, hablando en un video grabado en la prisión de Angola, en el estado de Luisiana.
Ronald Brooks expresó: “Estamos en contra de la esclavitud, y nos estamos movilizando para transformar nuestros guetos en comunidades, y nuestras prisiones y cárceles en lugares destinados a la redención humana, a la curación, a un aprendizaje mayor, que nos permitan ser productivos en nuestras comunidades y en donde sea que nos encontremos”.
Mientras tanto, en el centro de detención Northwest, en la ciudad de Tacoma, en Washington, cuatro inmigrantes comenzaron su 14º día de huelga de hambre. Estas son las palabras de Murat Azaniez, un immigrante ruso que sostiene que continuará su huelga de hambre hasta ser liberado. El martes habló con Democracy Now! desde el centro de detención.
Murat Azaniez expresó: “Me encuentro en una condición crítica. Estoy muy débil, tengo dificultades para llegar al lavabo o a la ducha”.
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