Una serie de protestas han azotado el mundo en los últimos días, desde Sudamérica hasta Asia y Oriente Medio. En Chile, hasta ocho personas han muerto en los disturbios generalizados que han sacudido el país. El presidente chileno, Sebastián Piñera, ha cancelado el aumento de las tarifas del metro que inicialmente provocó las protestas. Pero las manifestaciones siguen en aumento, y hay convocado un paro nacional para este lunes. El fin de semana Piñera declaró el estado de emergencia en Santiago y otras cinco ciudades, imponiendo un toque de queda y enviando a los militares a las calles en respuesta a los disturbios civiles por primera vez desde el fin del régimen del dictador Augusto Pinochet, quien gobernó el país desde 1973 hasta 1990. Al menos 1.400 manifestantes han sido detenidos en todo el país.
Mientras tanto, en Londres, hasta un millón de personas se reunieron frente al Palacio de Westminster para rechazar el acuerdo del Brexit del primer ministro, Boris Johnson. Fue una de las mayores manifestaciones públicas de la historia británica.
Las protestas masivas contra el Gobierno también están aumentando en el Líbano, y se informa que el domingo más de un millón de personas salieron a las calles. El primer ministro libanés, Saad Hariri, ha dado de plazo hasta este lunes a su Gobierno de coalición para acordar reformas que apacigüen a los manifestantes, pero muchos ya están pidiendo su destitución.
bq. El manifestante Hiba Zbeidi dijo: “Queremos que se vayan los tres: el presidente, Michel Aoun, el primer ministro, Saad Hariri y el presidente del parlamento, Nabih Berri. Si no se van, seguiremos en la calle. Dormiremos aquí”.En Haití, los manifestantes también piden la destitución del Gobierno. Al menos 30 personas han muerto en disturbios generalizados en las últimas semanas, y los manifestantes exigen la dimisión del presidente, Jovenel Moïse.
En Hong Kong, cientos de miles de personas desbordaron las calles el domingo mientras los jóvenes continúan reclamando mayor autonomía de Beijing.
En Azerbaiyán, decenas de personas fueron arrestadas el domingo en protestas contra la corrupción, la falta de democracia y los bajos salarios.
En Barcelona, continúan las manifestaciones tras la sentencia de la semana pasada contra nueve líderes separatistas por su papel en la declaración de independencia de Cataluña realizada en 2017.
Y en Pakistán, miles de personas marcharon el domingo por las calles de Islamabad para expresar solidaridad con el pueblo de Cachemira.
El manifestante Raja Mehtab Ashraf afirmó: “Hoy, ocho millones de personas son víctimas del toque de queda en el territorio de Cachemira ocupado por India. Trascurridos 75 días, la gente permanece bajo asedio en sus hogares. Esta acción tiene como objetivo sacudir la conciencia de la comunidad internacional para que puedan prestar atención al problema y que el pueblo de Cachemira logre obtener su derecho fundamental a la autodeterminación”.
En agosto, India revocó el estatus semiautónomo de Cachemira, arrestó a miles de personas e interrumpió el acceso a internet y a otros tipos de comunicación. La medida ha aumentado las tensiones entre las dos potencias nucleares. Al menos nueve personas murieron durante el fin de semana, cuando India y Pakistán intercambiaron disparos sobre la línea que divide el territorio en disputa.