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Yazmín Juárez, joven guatemalteca madre de la niña que murió de una infección pulmonar tras haber sido retenida en un centro de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, declaró ante los miembros de un panel del Congreso de EE.UU. el miércoles 10 de julio. Juárez contó la historia de su hija, Mariee que murió a los 19 meses de edad el año pasado poco después de ser dada de alta del Centro de Detención Familiar de Dilley, Texas. Juárez presentó una demanda por $60 millones de dólares contra el Departamento de Seguridad Nacional, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas y la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo y el Departamento de Salud y Servicios Humanos. El subcomité de la Cámara de Representantes se reunió para examinar el tratamiento que los refugiados reciben en los centros de detención estadounidense. Esto ocurrió apenas una semana después de que los legisladores acudieran a la frontera entre México y Estados Unidos para observar el tratamiento horrible que los menores y las familias de refugiados reciben en las cárceles de inmigración, tras denuncias de que los solicitantes de asilo continuaban en condiciones insalubres e inseguras. Mientras tanto, NBC informa que los menores migrantes encerrados en Yuma, Arizona, fueron sometidos a malos tratos y violencia sexual.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que le hicimos (en inglés) a la representante demócrata Nanette Barragán de California, que acaba de visitar centros de detención en Texas. Barragán es la segunda vice titular del Caucus Hispánico del Congreso y cumple funciones en el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes.
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