Estados Unidos asesinó al comandante iraní general Qassem Soleimani, acción que representa una importante escalada del conflicto con Irán, que ahora amenaza con involucrar a Irak y todo Medio Oriente. El presidente Trump autorizó el ataque con un avión no tripulado que acabó con vida de Soleimani y otras cuatro personas, entre ellas, un importante jefe de la milicia iraquí, en el Aeropuerto Internacional de Bagdad el jueves 2 de enero por la noche, hora de EE.UU., viernes 3 por la mañana, hora de Bagdad. Irán se refirió al asesinato de Soleimani como un acto de “terrorismo internacional”. El canciller iraní, Javad Zarif, dijo “Estados Unidos es el responsable de las consecuencias que su temeridad inescrupulosa pueda tener”. El Pentágono justificó el asesinato de Soleimani al afirmar que se trató de un ataque defensivo porque el general estaba “desarrollando activamente planes para atacar a diplomáticos y miembros de servicios estadounidenses en Irak y en toda la región”. El Pentágono no ofreció ninguna prueba de un ataque planeado inminente.
Para saber más de este tema, puede ver la conversación que mantuvimos (en inglés) con el profesor iraní Trita Parsi que es vicepresidente ejecutivo del nuevo centro de estudios Instituto Quincy.