El martes, se presentaron alegatos telefónicamente ante la Corte Suprema de Estados Unidos en el marco de un caso que tiene por objetivo determinar la constitucionalidad de una ley de 2003 que obliga a organizaciones sin fines de lucro basadas en Estados Unidos que tienen filiales en el extranjero a denunciar públicamente hechos de prostitución, si quieren acceder a fondos federales para luchar contra la epidemia de sida. Durante mucho tiempo, las organizaciones de ayuda han manifestado que esa ley obstaculiza la capacidad de sus filiales en el extranjero de brindar asesoría a trabajadores sexuales acerca de los riesgos del contagio del VIH.
En otras noticias relativas a la Corte Suprema, la jueza Ruth Bader Ginsburg, de 87 años de edad, fue hospitalizada nuevamente el martes para someterse a un tratamiento no quirúrgico de un problema en la vesícula biliar. Aun así, planea participar en la presentación oral de alegatos que se realizará telefónicamente este miércoles en el marco de un caso vinculado a la Ley de Cuidados Asequibles y el control de natalidad.