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En un histórico acuerdo judicial, la ciudad de Louisville, Kentucky, pagará 12 millones de dólares a la familia de Breonna Taylor a más de seis meses de que la Policía le disparara a la paramédica negra de 26 años en su propio departamento, causando su muerte. Desde entonces, el nombre de Taylor se convirtió en un emblema del levantamiento social en defensa de las vidas negras. Es una de las reparaciones económicas más grandes que se hayan abonado en Estados Unidos por el asesinato de una persona negra a manos de la policía. El gobierno de la ciudad también instituirá reformas importantes en el departamento de Policía responsable de la muerte de Taylor.
Para ampliar esta información, vea (en inglés) fragmentos de la notable conferencia de prensa en la que el alcade de Louisville, Greg Fischer, acompañado de familiares de Taylor, anunció el acuerdo.