El director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos advirtió el miércoles que los residentes de ese país no deberían esperar recibir una vacuna contra el coronavirus por lo menos hasta mediados de 2021, lo que contradice la afirmación hecha por el presidente Trump de que al menos 100 millones de dosis podrían ser distribuidas para fines de 2020. El doctor Robert Redfield habló en una audiencia del Senado sobre la respuesta del Gobierno federal a la pandemia de COVID-19.
Dr. Robert Redfield: “Si me pregunta cuándo estará disponible de forma genérica para el público estadounidense, para que podamos comenzar a aprovechar la vacuna para volver a nuestra vida normal, creo que probablemente sea en el tercer trimestre… finales del segundo trimestre o tercer trimestre de 2021”.
El presidente Donald Trump arremetió contra el testimonio del doctor Redfield y sostuvo en la sala de conferencias de prensa de la Casa Blanca que el principal funcionario de salud pública de Estados Unidos se había equivocado.
bq.Presidente Donald Trump: “Creo que cometió un error cuando dijo eso. Es información incorrecta, simplemente. Me comuniqué telefónicamente con él y no me dijo eso. Y creo que quizás confundió el mensaje”.
Asimismo, Trump contradijo al director de las autoridades sanitarias sobre el uso de tapabocas, al sostener que una vacuna sería mucho más efectiva que las máscaras para cubrirse el rostro para detener la propagación del coronavirus. Dichos comentarios se produjeron después de que el doctor Redfield estimara que una posible vacuna contra el coronavirus podría tener solo un 70% de efectividad en generar una respuesta inmune, lo que hace que el uso generalizado de tapabocas sea fundamental para poner fin a la pandemia en el futuro.
Dr. Robert Redfield: “Los tapabocas son la herramienta de salud pública más importante y poderosa que tenemos. Y continuaré pidiendo a todos los estadounidenses, a todas las personas de nuestro país, que adopten el uso de tapabocas. Ya he dicho que, si lo hiciéramos durante seis, ocho, diez, doce semanas, tendríamos esta pandemia bajo control”.
Estados Unidos reportó el miércoles casi 1.000 nuevas muertes por coronavirus. La cifra oficial de víctimas fatales de la enfermedad se acerca a las 197.000, la más alta a nivel mundial por un amplio margen. Durante un lapso de 24 horas se confirmaron casi 40.000 nuevos casos de COVID-19, muchos de ellos motivados por brotes a gran escala en campus universitarios.
El miércoles, miembros de la conferencia de deporte universitario “Big Ten” se retractaron y sostuvieron que la temporada de fútbol americano prevista inicialmente para septiembre se llevará a cabo este año, aunque reconocieron que muchos jugadores contraerán COVID-19 como resultado. El presidente Trump celebró el anuncio con un tuit que decía: “¡Es un gran honor para mí haber ayudado!”.
Miembros del la Big Ten afirmaron que establecerían un registro cardíaco para los estudiantes-atletas contagiados. En el anuncio, manifestaron: “El registro y los datos asociados intentarán responder a muchas de las incógnitas con respecto a las manifestaciones cardíacas en atletas de élite con COVID-19”.
En respuesta, la profesora de derecho deportivo Alicia Jessop tuiteó: “Estados Unidos tiene un historial desagradable en lo que respecta a la investigación médica y la comunidad negra, desde el estudio de Tuskegee sobre la sífilis hasta el uso de las células cancerosas de Henrietta Lacks sin que ella lo supiera. Si la Big Ten no recibió el consentimiento INFORMADO de los jugadores, eso se sumará a esta letanía”.
En la costa del golfo de México, al menos una persona resultó muerta y más de medio millón de personas quedaron sin suministro de electricidad, luego de que el huracán Sally causara lluvias torrenciales y graves inundaciones en las comunidades costeras desde el noroeste de Florida hasta Misisipi. En la ciudad de Pensacola, una sección del Puente de las Tres Millas fue destruida después de que una barcaza chocara contra la estructura, cortando el acceso a la ciudad de Gulf Breeze. Las autoridades afirman que partes de Florida recibieron el equivalente a cuatro meses de lluvia en solo cuatro horas.
El fiscal general William Barr declaró a los fiscales federales que consideraran la posibilidad de presentar cargos de sedición contra los manifestantes que destruyen propiedad privada, acusándolos de conspirar para derrocar al gobierno de Estados Unidos. Así lo informó el periódico The Wall Street Journal, que también afirma que Barr pidió a la división de derechos civiles del Departamento de Justicia que considerara la posibilidad de presentar cargos penales contra la alcaldesa de Seattle, Jenny Durkan, por permitir que los manifestantes de Black Lives Matter (Las vidas negras importan) establecieran una zona libre de policía en su ciudad.
La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles condenó las observaciones de Barr en una declaración: “Tratar la protesta como una forma de sedición es algo que nadie defenderá en un tribunal, pero está claro que ese no es el punto central de este asunto. Es un intento tiránico y antiestadounidense de silenciar las demandas de justicia racial y el fin de la violencia policial”.
Esta noticia llega cuando el periódico The Washington Post informa que el principal oficial de la policía militar del Pentágono trató de desplegar un arma de “rayos de calor” de microondas contra los manifestantes en la plaza Lafayette de Washington D.C. mientras las protestas de Black Lives Matter se extendían hacia las puertas de la Casa Blanca a principios de junio.
Por otra parte, el miércoles el fiscal general Barr comparó las órdenes de quedarse en casa durante la pandemia con una forma de arresto domiciliario. Barr afirmo: “Sin contar el período de esclavitud, esta es la mayor intrusión en las libertades civiles de la historia estadounidense”.
Michael Caputo, el principal portavoz del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos (HHS, por su sigla en inglés), ha anunciado que tomará una licencia de 60 días por razones médicas. Caputo ha enfrentado solicitudes de dimisión después de acusar a los científicos del gobierno de “sedición”, afirmando que había una “unidad de resistencia” dentro de los Centros para el Control y Prevención de enfermedades intentando perjudicar al presidente Donald Trump. Caputo es un viejo asociado del consultor político conservador Roger Stone y fue nombrado para su puesto en el departamento a pesar de no tener experiencia previa en el sector sanitario.
La cadena de noticias CNN informa que el secretario interino de Seguridad Nacional, Chad Wolf, podría desafiar la citación de la Cámara de Representantes de Estados Unidos para presentarse a testificar el día de hoy. Esto ocurre días después de que un juez federal dictaminara que Wolf probablemente se esté desempeñando ilegalmente como secretario interino.
En el Congreso de Estados Unidos, los republicanos del Senado confirmaron el miércoles a otros dos de los nominados judiciales del presidente Trump en posiciones vitalicias en tribunales federales. David Dugan y Stephen McGlynn son opositores de las libertades reproductivas y el derecho al aborto desde hace mucho tiempo. Las confirmaciones se producen cuatro meses después de que la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, aprobara la Ley Héroes, un paquete de ayuda económica por el coronavirus de 3 billones de dólares. El líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, se ha negado a programar una votación sobre el proyecto de ley y lo ha calificado de “lista de deseos liberales poco seria”.
En el estado de Nebraska, un gran jurado acusó formalmente al dueño de un bar, que es blanco, por el tiroteo fatal de James Scurlock, un manifestante negro, en la ciudad de Omaha. Scurlock fue asesinado a tiros el 30 de mayo durante las protestas por el asesinato de George Floyd. Tenía 22 años de edad. El fiscal local del condado inicialmente se negó a presentar cargos y llevó el caso ante un gran jurado. El propietario del bar, Jake Gardner, había alegado defensa propia, pero un fiscal especial dijo que la evidencia brindada por el propio Gardner desmiente esa afirmación.
Legisladores demócratas han pedido una investigación sobre informes de que un médico en el estado de Georgia ha estado realizando histerectomías a mujeres inmigrantes detenidas en una prisión del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos sin su consentimiento. La impactante afirmación salió a la luz por primera vez debido a una denuncia presentada por Dawn Wooten, una enfermera que trabaja en el centro de detención del condado de Irwin en el estado de Georgia. Wooten apareció en la cadena de televisión MSNBC el martes por la noche.
Dawn Wooten: “Muchas de las mujeres detenidas venían y me preguntaban, en numerosas ocasiones: ‘Señora Wooten, me hicieron una histerectomía, ¿por qué?’. No tenía respuesta en cuanto al porqué de esos procedimientos. Y una señora se me acercó la última vez, entre octubre de 2019 y hasta el 2 de julio y me preguntó: ‘¿Quién es él? ¿Es el recolector de úteros? ¿Recolecta úteros?’. Le pregunté a qué se refería, y me dijo: ‘A todas las mujeres con las que he hablado le han practicado una histerectomía’”.
En noticias relacionadas, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas ha detenido temporalmente la deportación de Pauline Binam, una madre camerunesa que dice haber sido esterilizada involuntariamente mientras estaba detenida en el estado de Georgia. Binam, quien vive en Estados Unidos desde los dos años de edad, ya estaba en el avión el miércoles cuando su deportación fue suspendida.
En otras noticias sobre inmigración, el Gobierno del presidente Trump le ha pedido a la Corte Suprema que decida si pueden excluirse los inmigrantes indocumentados de las cifras del censo que se utilizan para determinar la proporción de escaños en el Congreso para cada estado. Un tribunal federal de Nueva York recientemente impidió un intento similar por parte del Gobierno de Trump.
La nación caribeña de Barbados ha anunciado que planea destituir a la reina Isabel II de Inglaterra como jefa de Estado. En un comunicado, el Gobierno declaró: “Ha llegado el momento de dejar nuestro pasado colonial atrás”.