En Brasil, el número total de muertes tras unas inundaciones sin precedentes en el estado nororiental de Bahía ha aumentado a 20, con unas 35.000 personas desplazadas después de que un par de represas colapsaran durante las festividades de Navidad. Vitoria Rocha, de 81 años, perdió su hogar, y casi pierde la vida, después de que su localidad se viera sumergida por las inundaciones.
Vitoria Rocha: “Cuando llegué aquí y vi los estragos, no lo podía creer. Parecía que lo que veía no era real. Mi casa destrozada, todas mis cosas destruidas; todo era un desastre”.