El presidente francés, Emmanuel Macron, ha reconocido que Francia tiene una “deuda” con la Polinesia francesa, territorio en el que los franceses llevaron a cabo casi 200 pruebas nucleares entre 1966 y 1996. Sin embargo, Macron no se disculpó por las pruebas durante la visita que realizó al territorio del Pacífico Sur. Un informe reciente realizado por el sitio web de periodismo de investigación francés Disclose estimó que 100.000 residentes de la Polinesia francesa pueden haber estado expuestos a la radiación de las pruebas.
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