Biden salió de gira por Asia por primera vez como presidente de EE.UU., para reunirse con los líderes de los otros países miembros de la alianza “Quad”, Japón, India y Australia. La iniciativa es parte de los intentos de contrarrestar el creciente poder de China en la región. Durante el viaje, Biden prometió defender militarmente a Taiwán si China lo ataca, contradiciendo así la antigua política de “ambigüedad estratégica” que Estados Unidos ha tenido respecto a Taiwán. “La idea de que Estados Unidos está obligado a ir en defensa de Taiwán en caso de un ataque chino, sencillamente no es una política estadounidense”, dice Michael Swaine, director del programa Asia Oriental del Instituto Quincy. Swaine afirma que la política oficial de Estados Unidos y China respecto a Taiwán —que prioriza la unificación pacífica por encima de la fuerza militar— viene siendo sutilmente debilitada por ambas partes y “el reciente comentario del presidente Biden la debilita aún más”.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que tuvimos con Michael Swaine.