Estados Unidos ha anunciado que enviará un sistema de misiles de artillería de última generación a Ucrania que pueden alcanzar objetivos que se encuentran hasta unos 80 kilómetros de distancia. El sistema de misiles es parte de un nuevo paquete estadounidense de ayuda militar para Ucrania por un valor de 700 millones de dólares, que también incluye misiles antitanque de corto alcance Javelin, municiones de artillería, helicópteros y radares de vigilancia aérea. La Casa Blanca dijo que Ucrania aseguró que no utilizará el nuevo sistema de misiles para atacar objetivos dentro de Rusia. Rusia criticó el paquete estadounidense de ayuda armamentística para Ucrania y dijo que Estados Unidos está “echando leña al fuego de manera deliberada”.
El periódico The Wall Street Journal informa que Francia y Alemania también están expresando su preocupación por el envío de más armas pesadas a Kiev, ya que ven cada vez más remota la posibilidad de que Ucrania pueda expulsar a Rusia de la región de Dombás. A diferencia de Estados Unidos y el Reino Unido, Francia y Alemania han instado a negociar un alto el fuego para poner fin a la guerra.
Esto se produce al tiempo que Rusia parece estar cada vez más cerca de apoderarse de la ciudad de Severodonetsk, en el este de Ucrania. El martes, el gobernador de la región de Lugansk dijo que Rusia se ha apoderado de la mayor parte de la ciudad industrial que ha sido devastada por varias semanas de bombardeos.