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En San Antonio, Texas, 53 migrantes que buscaban refugio en Estados Unidos murieron a principios de esta semana después de haber sido encerrados en un sofocante camión. Defensores de derechos humanos culparon de la tragedia a la implementación de políticas migratorias restrictivas como los Protocolos de Protección al Migrante, también conocidos como MPP, y el programa “Permanecer en México”. El 30 de junio, en un fallo de cinco votos a favor y cuatro en contra, la Corte Suprema de Estados Unidos decidió que el presidente Biden puede poner fin a esta política de la era Trump, que obligaba a decenas de miles de solicitantes de asilo a permanecer del lado mexicano de la frontera, en condiciones inseguras, mientras sus casos se resolvían en EE.UU. “Cada muerte relacionada con la migración se puede prevenir con políticas que se centren verdaderamente en la recepción y atención de las personas”, dice Claudia Muñoz, codirectora ejecutiva de la organización Grassroots Leadership.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que tuvimos con Claudia Muñoz.
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