El 7 de agosto, cuando el Senado de Estados Unidos aprobó la Ley de Reducción de la Inflación, el bloque republicano logró impedir que se pusiera un tope al precio de la insulina. Robert Weissman, presidente de la organización Public Citizen, dice que a pesar de sus defectos, esta ley es una victoria contra las ganancias abusivas de la industria farmacéutica. “Les preocupa mucho que esto represente un quiebre y conduzca a más negociaciones, una vez que el pueblo estadounidense vea claramente el ahorro que se puede alcanzar”, dice Weissman.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que tuvimos con Robert Weissman.
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