Titulares17 de octubre de 2023

La crisis humanitaria de Gaza se ha agravado tras once días consecutivos de incesantes ataques israelís contra el sitiado territorio palestino. Las autoridades sanitarias afirman que los ataques aéreos y bombardeos más recientes de Israel, incluidos los ataques que fueron lanzados contra la ciudad de Rafah y contra tres viviendas de la ciudad de Jan Yunis, se cobraron la vida de al menos 71 personas. Asimismo, los ataques que se produjeron en el sur de la Franja de Gaza mataron e hirieron a civiles que habían seguido la orden de Israel de evacuar la mitad norte del territorio palestino.

Desde el 7 de octubre, los bombardeos que Israel ha lanzado sobre Gaza se han cobrado la vida de más de 2.800 personas, más de un tercio de las cuales son menores, una cifra que no incluye a unos 1.000 palestinos adicionales que se encuentran atrapados bajo los escombros de las viviendas y negocios que han sido destruidos durante los ataques. Dado que no se permite el ingreso de agua a la Franja de Gaza y no se dispone de combustible para hacer funcionar las plantas desalinizadoras, los residentes del enclave se han visto obligados a recurrir al único acuífero que hay en el territorio, que está contaminado con aguas residuales y agua de mar. Asimismo, crece el temor por la propagación de enfermedades al tiempo que la basura se acumula y no es posible tratar las aguas residuales.

La ONU informa que, de los 23 hospitales que hay en Gaza, 20 solo funcionan parcialmente, con una escasez crítica del combustible requerido para hacer funcionar los generadores que mantienen en funcionamiento dispositivos médicos vitales. Por otro lado, se han acabado los analgésicos y los bancos de sangre se están agotando. La Organización Mundial de la Salud afirma que entre las personas que corren mayor riesgo en Gaza se encuentran 84.000 mujeres embarazadas.

En la tarde del martes, el único paso fronterizo que conecta Egipto y la Franja de Gaza, que se encuentra ubicado en la ciudad de Rafah, permanecía cerrado, mientras Israel sigue negando el ingreso al territorio palestino a una caravana de camiones con ayuda humanitaria que se encuentran alineados en el lado egipcio de la frontera. Estas fueron las palabras expresadas por Mariam, una niña palestino-británica cuya familia lleva días intentando escapar de Gaza.

Mariam: “Tengo mucho miedo. Todo el tiempo pienso que podría morir en Gaza a causa de una bomba, eso no es algo bueno. Por ejemplo, a donde quiera que voy, huyo, y simplemente encuentro bombas y gente muerta. Y quizás algún día acabe como ellos. Pero eso es algo que me da mucho miedo”.

Combatientes palestinos han matado a más de 1.400 israelíes, la mayoría de los cuales murieron el 7 de octubre, cuando la organización Hamás lanzó su ataque sorpresa. El lunes, funcionarios israelíes dijeron que Hamás tenía a 199 personas cautivas, unas 50 más de lo que se había informado anteriormente. Durante el fin de semana, cientos de manifestantes se congregaron frente al Ministerio de Defensa de Israel en la ciudad de Tel Aviv para exigir el fin de la violencia y el regreso seguro de los rehenes a sus hogares.

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha rechazado un proyecto de resolución presentado el lunes por Rusia que pedía un alto el fuego humanitario en Gaza. Gabón, Mozambique, los Emiratos Árabes Unidos y China votaron a favor del proyecto de resolución de alto el fuego, mientras que seis países se abstuvieron de votar y Francia, Japón, el Reino Unido y Estados Unidos votaron en contra. Estas fueron las palabras expresadas por el embajador de Rusia ante la ONU, Vassily Nebenzia.

Vassily Nebenzia: “Hoy el mundo entero ha esperado con ansias que el Consejo de Seguridad tome medidas para poner fin al derramamiento de sangre. Pero las delegaciones de los países de Occidente básicamente han saboteado esas expectativas”.

El presidente ruso, Vladimir Putin, viajará esta semana a Pekín para reunirse con el presidente chino, Xi Jinping. Durante el fin de semana, el ministro de Relaciones Exteriores de China dijo que la guerra que Israel está librando en la Franja de Gaza había ido “más allá de la defensa propia” y constituía un “castigo colectivo”, que es considerado un crimen de guerra.

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, regresó el lunes a Israel para reunirse con los líderes israelíes tras culminar una gira relámpago de fin de semana por Catar, Jordania, Baréin, los Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí y Egipto. Blinken dijo que el presidente Biden viajará este martes a Israel en una muestra de solidaridad con ese país, al tiempo que el Ejército israelí se prepara para llevar a cabo una ofensiva terrestre en Gaza.

Secretario de Estado Antony Blinken: “El presidente Biden volverá a dejar claro, como lo ha hecho de manera inequívoca desde que Hamás mató a más de 1.400 personas, incluidos al menos 30 estadounidenses, que Israel tiene el derecho, y, de hecho, el deber, de defender a su pueblo de Hamás y otros terroristas, y de impedir que se produzcan futuros ataques”.

Blinken dijo que Biden viajará luego a Jordania para reunirse con el rey jordano, Abdalá II, el presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sisi, y el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás. El viaje de Biden se produce después de que la Marina de Guerra de Estados Unidos dijera que está enviando un segundo grupo de ataque con portaaviones, liderado por el USS Dwight D. Eisenhower, al Mediterráneo oriental para apoyar a Israel.

En Estados Unidos, miles de estadounidenses judíos y sus simpatizantes marcharon el lunes hacia la Casa Blanca para exigir que el presidente Biden solicite un alto el fuego en la franja de Gaza; más de 50 personas fueron arrestadas por actos no violentos de desobediencia civil. Estas fueron las palabras expresadas por la líder de la organización judío estadounidense If Not Now, Eva Borgwardt.

Eva Borgwardt: “Todos los que estamos aquí estamos sufriendo un dolor inimaginable. Y a pesar de ese dolor, estamos decididos a detener este genocidio, porque conocemos las señales de advertencia. Es por ello que estamos bloqueando todos las entradas a la Casa Blanca, o todas las que podamos bloquear, porque el presidente Biden no ha estado escuchando las voces de los judíos y palestinos estadounidenses y de las personas que los apoyan, que dicen que no podemos intentar hacer lo mismo que no ha funcionado durante décadas”.

En el Congreso de Estados Unidos, un grupo de congresistas del sector progresista del Partido Demócrata de la Cámara de Representantes presentó una resolución en la que se pide al presidente Biden que impulse un alto el fuego inmediato en Gaza. La congresista demócrata del estado de Misuri Cori Bush, quien participó de la redacción de la resolución, dijo: “Estados Unidos tiene la responsabilidad fundamental de agotar todas las herramientas diplomáticas que estén a nuestra disposición para evitar que se comentan atrocidades masivas y salvar vidas. No podemos bombardear nuestro camino hacia la paz, la igualdad y la libertad”.

En la localidad de Bridgeview, en el estado de Illinois, varias personas participaron el lunes en el entierro de Wadea Al-Fayoume, un niño palestino-estadounidense de seis años que murió tras ser apuñalado en su propia casa como parte de un crimen de odio contra los musulmanes. La madre del niño, Hanaan Shahin, quedó hospitalizada con heridas graves tras ser agredida el sábado por el propietario de la vivienda que alquilaba, quien, según se informa, gritó “Los musulmanes deben morir” durante el ataque. El propietario compareció el lunes ante un tribunal para enfrentar cargos de asesinato. Estas fueron las palabras expresadas por Deanna Othman, una maestra de secundaria palestino-estadounidense y miembro de la comunidad que asistió al funeral de Al-Fayoume.

Deanna Othman: “Estamos viendo las repercusiones de la retórica que nuestro Gobierno ha estado difundiendo y que, como saben, muchos medios de comunicación han estado publicando sobre los palestinos, quienes son descritos como [seres] menos que humanos. Y este niño lamentablemente ha pagado el precio más alto de dicha retórica”.

El congresista republicano del estado de Ohio Jim Jordan dice estar seguro de que obtendrá los 217 votos que necesita para convertirse en el próximo presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos cuando los legisladores se reúnan este martes en el hemiciclo para votar. Dado que los 212 demócratas de la Cámara de Representantes apoyan al congresista neoyorquino Hakeem Jeffries, Jordan solo puede darse el lujo de perder cuatro votos republicanos. Jordan fundó el bloque republicano ultraderechista denominado “Bloque de la Libertad” y actualmente preside el Comité Judicial de la Cámara Baja. La Cámara de Representantes permanece en un impasse sin precedentes al tiempo que los republicanos no pueden ponerse de acuerdo sobre la elección de un nuevo presidente.

El Gobierno de Biden ha llegado a un esperado acuerdo en una histórica demanda colectiva presentada por la Unión Estadounidense para las Libertades Civiles y familias migrantes que fueron separadas en la frontera entre Estados Unidos y México durante el mandato del expresidente Donald Trump. Si se aprueba, el acuerdo impedirá que el Gobierno federal aplique una política general para separar a las familias migrantes durante al menos los próximos ocho años, y solo permitirá esta práctica en circunstancias limitadas. El acuerdo también incluye beneficios para los migrantes afectados por la política de “tolerancia cero” que se implementó durante el Gobierno de Trump, quienes podrán obtener permiso para permanecer en Estados Unidos, permisos de trabajo, ayuda en relación a la vivienda y acceso a servicios legales, de atención médica y de salud mental, en el caso de las familias que padezcan un trauma debido a dicha política.

La Unión Estadounidense para las Libertades Civiles dijo que el acuerdo beneficiará a al menos 4.500 niños y niñas, y sus familias. El abogado principal de la organización, Lee Gelernt, dijo en un comunicado: “Si bien nadie nunca afirmará que este acuerdo puede reparar por completo el daño intencionalmente causado a estos niños y niñas pequeños, este es un comienzo necesario”. El propio presidente Biden se ha enfrentado a fuertes críticas por las duras políticas fronterizas y de inmigración implementadas durante su mandato, que también han llevado a la separación de familias solicitantes de asilo.

Haga clic aquí para ver nuestra cobertura sobre este tema.

Según se informa, en el estado de California, una solicitante de asilo guineana de 29 años murió mientras se encontraba recluida por funcionarios de inmigración estadounidenses en un centro de detención al aire libre que se encuentra ubicado en la ciudad fronteriza de San Diego. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos proporcionó pocos detalles sobre lo sucedido, y aún no se ha determinado la causa de la muerte. Organizaciones de defensa de los derechos humanos y organizaciones a favor de los inmigrantes habían advertido en reiteradas ocasiones sobre las olas de calor y otros peligros a los que se ven expuestos miles de solicitantes de asilo, incluidos bebés y niños y niñas pequeños, que se encuentran detenidos en los campamentos al aire libre que la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos posee en el desierto cerca de la localidad de Jacumba Springs. La agencia ha sido acusada de no proporcionar alimentos, agua, productos de higiene y atención médica adecuados a los solicitantes de asilo. La directora ejecutiva de la organización Al Otro Lado, Erika Pinheiro, dijo en un comunicado: “Esta es la primera muerte, pero no será la última si la Patrulla Fronteriza [de Estados Unidos] sigue utilizando estos campamentos en un intento inútil e inhumano por disuadir a los migrantes en lugar de procesar sus solicitudes rápidamente”.

En el estado de Virginia, al menos tres activistas ambientales fueron arrestados el lunes tras amarrarse a una máquina, lo que paralizó temporalmente la construcción del gasoducto Mountain Valley. Decenas de manifestantes acudieron ayer al lugar donde se está construyendo el gasoducto para participar en una manifestación pacífica.

Protectores de agua:
“¡Por el agua que bebemos! ¡Por el agua que bebemos! ¡Por el lugar que llamamos hogar! ¡Por el lugar que llamamos hogar! ¡Por el aire que respiramos! ¡Por el aire que respiramos! ¡Por el agua que bebemos! ¡Por el agua que bebemos! ¡Por el lugar que llamamos hogar! ¡Por el lugar que llamamos hogar!”.

Entre los manifestantes que fueron arrestados el lunes se encontraba la abogada y activista indígena Tara Houska. El controvertido gasoducto Mountain Valley, el cual está valuado en 6.600 millones de dólares, atravesará los estados de Virginia y Virginia Occidental, y transportará más de 56 millones de metros cúbicos de gas fracturado a través de más de 1.000 arroyos y humedales de la región de los Apalaches. El proyecto ha contado durante mucho tiempo con el respaldo del poderoso senador de Virginia Occidental Joe Manchin, que es la persona que más dinero recibe de la industria de los combustibles fósiles en el Congreso.