Israel ha acordado extender su tregua con la organización Hamás por un séptimo día para facilitar el intercambio de los rehenes retenidos en Gaza por prisioneros palestinos encarcelados en Israel. La prórroga se anunció pocos minutos antes de que la tregua expirara el jueves por la mañana y supone un alivio para los 2,3 millones de gazatíes tras 47 días de incesantes ataques israelíes que han provocado una enorme crisis humanitaria. Hamás liberó este miércoles a 16 rehenes: diez israelíes, cuatro ciudadanos tailandeses y dos personas con doble ciudadanía ruso-israelí. A cambio, Israel liberó a 30 mujeres y menores palestinos, muchos de los cuales estaban encarcelados por tiempo indefinido sin ninguna imputación de cargos en su contra en virtud de la política israelí conocida como “detención administrativa”. El miércoles, Hamás informó que su rehén israelí más joven, Kfir Bibas, de diez meses de edad, murió a causa de un ataque israelí en el que también fallecieron su madre y su hermano de cuatro años. Si se confirman esas muertes, estos rehenes se suman a las 15.000 personas que han perdido la vida a causa de la ofensiva israelí contra Gaza que se inició luego del ataque que Hamás llevó a cabo el 7 de octubre en el sur de Israel. Dos tercios de las personas fallecidas en Gaza son mujeres, niños y niñas.
El Ministerio de Salud palestino en Gaza informó el miércoles haber encontrado los restos en descomposición de cinco bebés palestinos prematuros que murieron después de que las fuerzas armadas israelíes ordenaran la evacuación del personal médico y bloquearan el acceso a la unidad de cuidados intensivos del hospital pediátrico al-Nasr. Imágenes impactantes filmadas por Al Mashhad, un medio con sede en Dubái, muestran a los bebés inertes en sus camas de hospital, aún conectados a respiradores y tubos intravenosos. Organizaciones de defensa de los derechos humanos piden una investigación internacional al respecto.
En los territorios ocupados de Cisjordania, un palestino de 21 años murió y otros cuatro resultaron heridos a causa de disparos israelíes mientras se concentraban frente a la prisión de Ofer en espera de los prisioneros palestinos que Israel iba a liberar. Mientras tanto, se ha identificado a los dos menores palestinos que murieron a causa de disparos israelíes durante una incursión que se llevó a cabo el miércoles en el campamento de refugiados de Yenín. Basil Suleiman Abu al-Wafa, de 15 años, murió en un hospital tras recibir un disparo en el pecho. Por su parte, Adam al-Ghoul, de ocho años, recibió un disparo en la cabeza mientras intentaba escapar de las fuerzas armadas israelíes, un hecho que fue capturado en imágenes de video. La Media Luna Roja afirmó que militares israelíes impidieron que personal médico llegara al campamento para atender a los heridos.
La policía israelí afirmó que tres personas murieron y varias más resultaron heridas el jueves por la mañana cuando dos atacantes palestinos abrieron fuego contra una parada de autobús en las afueras de Jerusalén. Dos soldados que estaban fuera de servicio y un civil armado mataron a tiros a los atacantes.
Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que se reanudará el ataque contra la Franja de Gaza una vez que expire el acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás.
Primer ministro Benjamin Netanyahu: “Tras completar esta etapa de devolución de nuestros rehenes, ¿Israel retomará los combates? Mi respuesta es un sí rotundo. No hay ninguna situación en la que no volvamos a luchar hasta el final. Esta es mi política. Todo el gabinete la apoya”.
Los comentarios de Netanyahu se produjeron después de que el ministro de Seguridad Nacional de Israel, el ultraderechista Itamar Ben-Gvir, amenazara con disolver el Gobierno de coalición dirigido por Netanyahu si Israel detiene el bombardeo contra Gaza.
En la ciudad de Nueva York, cientos de manifestantes pacíficos encabezados por un grupo de activistas interreligiosos se congregaron en el centro del distrito de Manhattan para exigir el fin del ataque de Israel contra Gaza y de su ocupación de los territorios palestinos. La manifestación se realizó en el marco de la ceremonia anual de encendido del árbol de Navidad del complejo de edificios Rockefeller Center. Grupos de policías fueron desplegados durante el evento y los activistas finalmente se concentraron frente al cercano edificio de la compañía de medios News Corp. Estas fueron las palabras expresadas por la activista Nerdeen Kiswani, de la organización Within Our Lifetime.
Nerdeen Kiswani: “En el Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, nos hemos congregado en apoyo de las 13 iglesias oficiales de Jerusalén y todo el municipio de Belén, que han pedido una movilización, no una celebración”.
En Washington, D.C., los congresistas Rashida Tlaib, Cori Bush y Jamaal Bowman, referentes del ala progresista del Partido Demócrata, se unieron este miércoles a un grupo de activistas, políticos y celebridades que transitaban el tercer día de su huelga de hambre para exigir un alto el fuego permanente en Gaza. Estas fueron las palabras expresadas por la congresista Tlaib durante la vigilia nocturna que se llevó a cabo frente a la Casa Blanca.
Congresista Rashida Tlaib: “Cuando termine esta pausa en los ataques, solo pienso en que le preguntaré a mis colegas: '¿Cuántas vidas más? ¿Cuántas vidas más serán suficientes? ¿Cuántos niños y niñas más hay que matar? ¿Cuántas familias más tienen que quedar traumatizadas y destrozadas?'. No hay nada humanitario, amigos, en dar a civiles inocentes unos días de descanso antes de que vuelvan a ser bombardeados”.
Ese mismo día, más temprano, los miembros de la Cámara de Representantes votaron casi por unanimidad a favor de aprobar una resolución que equipara el antisionismo con el antisemitismo, una equiparación que ha provocado reacciones en contra de cualquiera que critique al Gobierno israelí. Solo el congresista Thomas Massie votó en contra de la medida. Por su parte, la congresista Tlaib votó “presente”.
Empleados y solicitantes de empleo continúan denunciando medidas de represalia por alzar la voz en contra del ataque israelí contra Gaza. Jinan Chehade, una joven graduada de la Facultad de Derecho de la Universidad de Georgetown, afirma que le retiraron una oferta de trabajo en el destacado bufete de abogados Foley & Lardner LLP por publicar mensajes de apoyo al pueblo palestino en redes sociales, tras ser interrogada por los socios del bufete.
Jinan Chehade: “Consideraron que mi defensa de Palestina era un apoyo al terrorismo. Y señalaron que yo sería una de las únicas mujeres visiblemente musulmanas y árabes en el bufete de abogados en todo el país. Hoy alzo mi voz para denunciar la oleada de ataques que hemos presenciado contra los palestinos y las personas aliadas de su causa. [Estos ataques incluyen] el asesinato de Wadea al-Fayoume, un niño de seis años, el tiroteo contra tres estudiantes palestinos en el estado de Vermont y los graves ataques contra empleados y asociados como yo que defendemos a Palestina. Sin embargo, cuanto más denunciemos estos hechos, más poder tenemos. Así que hoy, además de alzar mi voz, también me estoy defendiendo y emprendiendo acciones legales”.
La organización Palestine Legal afirma que, desde el 7 de octubre, ha recibido más de 700 solicitudes de apoyo de defensores de los derechos del pueblo palestino. Esto representa el triple de la cifra que la organización informó durante todo el 2022.
El ex secretario de Estado de Estados Unidos Henry Kissinger, artífice de una política exterior estadounidense altamente militarizada durante las presidencias de Nixon y Ford, falleció a los 100 años. A finales de los años 60 y 70, Kissinger supervisó la gran expansión de la guerra de Vietnam y los bombardeos secretos en Laos y Camboya, en los que murieron hasta 150.000 civiles. En América Latina, Kissinger apoyó a las dictaduras que utilizaban la tortura y el asesinato como herramientas de represión política, como las de Bolivia, Uruguay y Argentina. En Chile, el ex secretario de Estado ayudó a derrocar al Gobierno elegido democráticamente de Salvador Allende, lo que dio paso a 17 años de dictadura bajo el mando del general Augusto Pinochet. En 1975, Kissinger y el presidente Ford se reunieron con el general Suharto, un exdictador de Indonesia, y le dieron el visto bueno para invadir Timor Oriental, lo que causó la muerte de un tercio de la población timorense. El escritor e historiador Greg Grandin, ganador de un Premio Pulitzer, afirmó en una ocasión que las acciones de Kissinger probablemente provocaron la muerte de hasta cuatro millones de personas. Haga clic aquí para ver la entrevista que mantuvimos con Greg Grandin sobre la vida y el legado de Henry Kissinger.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha acusado a un ciudadano indio de conspirar para asesinar a un destacado líder separatista sij que vive en la ciudad de Nueva York, después de que agentes federales presuntamente desbarataran un plan de asesinato a sueldo. Fiscales federales de Manhattan afirman que Nikhil Gupta, de 52 años, fue arrestado en la República Checa, en espera de su extradición a Estados Unidos, después de que un empleado gubernamental indio, cuya identidad no ha sido revelada, lo reclutara en mayo pasado para perpetrar el asesinato. Según se informa, Gupta ofreció una recompensa de 100.000 dólares a un sicario que resultó ser un agente encubierto de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés). El complot supuestamente tenía como objetivo a Gurpatwant Singh Pannun, un ciudadano estadounidense, abogado y portavoz de la organización Sikhs for Justice, que aboga por un Estado independiente para la comunidad sij en el norte de la India. La detención de Gupta se produce apenas dos meses después de que el Gobierno de Canadá declarara que agentes del Gobierno de India, dirigidos por el primer ministro del país, Narendra Modi, estaban directamente implicados en el asesinato del destacado líder sij y ciudadano canadiense Hardeep Singh Nijjar, ocurrido en junio.
Durante un evento del periódico The New York Times, el director ejecutivo de la red social X, Elon Musk, arremetió el miércoles contra los anunciantes que lo han boicoteado por republicar contenidos antisemitas.
Elon Musk: “Si alguien va a intentar chantajearme con publicidad, chantajearme con dinero, que se vaya al carajo. Que se vaya al carajo. ¿Está claro?”.
Más de 100 marcas han interrumpido sus anuncios en X, anteriormente conocida como Twitter, por lo que la red social podría perder 75 millones de dólares en ventas publicitarias para finales de año.