En Honduras, al menos 41 mujeres murieron el martes luego de que miembros de grupos criminales las atacaran dentro de una cárcel de mujeres de la localidad de Tamara. Los informes indican que las mujeres habían manifestado en reiteradas ocasiones haber recibido amenazas por parte de grupos criminales dentro de la prisión, pero no fueron escuchadas. Algunas de las mujeres fueron quemadas vivas, mientras que otras fueron apuñaladas y baleadas. Los familiares de las víctimas exigen justicia.
Pariente de la víctima: “Queremos saber quiénes son los que están vivos, porque son seres humanos. [Ellas] son nuestra familia. Las queremos ver y saber cómo están. Pero si todos callan, ¿qué venimos a hacer nosotros aquí? ¿A callarnos nosotros también? No, queremos respuestas”.