Más de 400 personas habrían sido detenidas en Rusia por rendir homenaje públicamente a Alexei Navalny. El más prominente opositor a Vladimir Putin en Rusia murió el viernes 16 de febrero, a los 47 años de edad, en una colonia penal del Ártico donde estaba cumpliendo una condena de 19 años por cargos de “extremismo”. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y otros líderes occidentales han responsabilizado directamente a Putin por la muerte de Navalny. Las autoridades penitenciarias dicen que Navalny murió de “síndrome de muerte súbita”, pero su familia aún no ha tenido acceso a su cuerpo para poder realizar una autopsia independiente. Hablamos del tema con Masha Gessen, periodista estadounidente de origen ruso, quien describe la evolución política de Navalny, que pasó de un pensamiento libertario etnonacionalista que buscaba aprovechar el “descontento xenófobo” a un activismo anticorrupción con una postura de nacionalismo cívico. “No tengo ninguna duda […] de que lo mataron”, dice Gessen. “Putin estaba decidido a ver a Navalny morir en prisión”.
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