El alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha pedido a las partes en conflicto de Sudán que brinden acceso seguro a las agencias de ayuda humanitaria al tiempo que la crisis humanitaria que azota el país empeora. Volker Türk habló el viernes en la ciudad de Ginebra.
Volker Türk: “Sudán se ha convertido en una pesadilla viviente. Prácticamente la mitad de la población, 25 millones de personas, necesita alimentos y asistencia médica de forma urgente. Alrededor del 80% de los hospitales han quedado fuera de servicio. La denegación aparentemente deliberada del acceso seguro y sin obstáculos a las agencias humanitarias dentro del propio Sudán constituye una grave violación del derecho internacional y puede equivaler a un crimen de guerra”.