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l miércoles 24 de abril, cientos de activistas ambientales se congregaron en la sede central de la empresa Citigroup, ubicada en Nueva York, para exigir que este poderoso banco deje de financiar a las empresas de combustibles fósiles. Esta acción de protesta se llevó a cabo después de una audiencia del Día de la Tierra, la primera de su tipo, celebrada también en Nueva York, en la que ambientalistas de todo el mundo se reunieron para repudiar y denunciar lo que llaman el “racismo ambiental” de Citigroup. El Citibank es el segundo mayor financista a nivel mundial de emprendimientos de carbón, petróleo y gas en el mundo. “Siempre dicen: 'Nos importa el planeta' […] pero las acciones valen más que las palabras”, plantea Alice Hu, activista de la organización New York Communities for Change. “Desde la firma de los Acuerdos de París, en 2015, el Citibank ha invertido más de 332.000 millones de dólares en combustibles fósiles”. También hablamos con Roishetta Ozane, una líder ambientalista negra de Sulphur, Louisiana, que viene impulsando la lucha contra la expansión de los emprendimientos de gas natural licuado financiados por Citigroup en su comunidad. Ozane señala que ha visto en su propia familia los impactos que tienen tales proyectos en la salud. “Estoy luchando no solo por mí y por mi comunidad, sino por mis hijos. Y al luchar por los míos estoy luchando por todos los hijos e hijas del mundo”, dice Ozane.
Para ver la entrevista completa inglés, haga clic aquí.
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