Volvemos a Estados Unidos, donde un ex funcionario de la CIA demandó a la agencia por haberlo despedido por error por cuestionar la opinión de la agencia de que Irak tenía armas de destrucción masiva.
En 2001, un año antes de la invasión a Irak, el funcionario manifestó que se enteró a través de un informante que Irak había abandonado el programa de enriquecimiento de uranio. Sin embargo, el funcionario de la CIA sostiene que la agencia nunca compartió la información con otros órganos o con los funcionarios que llevan a cabo las políticas.
El funcionario, que había trabajado en la CIA durante 20 años, fue despedido el año pasado. Su abogado comparó el caso con el de Valerie Plame, la agente encubierta de la CIA, cuya identidad fue revelada luego de que su esposo Joseph Wilson cuestionara la afirmación del gobierno de Bush de que Irak pretendía comprar óxido de uranio llamado “yellowcake” a Níger.
El abogado del ex agente de la CIA, Roy Krieger dijo “En ambos casos, los funcionarios proporcionaron información no deseada acerca de las armas de destrucción masiva en el período anterior a la invasión de Irak, por lo que fueron castigados”.