Un gran escándalo de espionaje se desató también en Grecia, donde se reveló que se interceptaron los teléfonos celulares de la élite política y militar del país antes de los Juegos Olímpicos en Atenas, hace dos años. Entre los objetivos del espionaje estaban los ministros de relaciones exteriores, defensa, y orden público, además del primer ministro y el comandante de las fuerzas armadas. También se incluían activistas por los derechos civiles, el director de la coalición 'stop the war' ('detengan la guerra'), periodistas y árabes residentes en Atenas. El gobierno griego afirma que no está claro quién llevó a cabo el espionaje telefónico. Según The Observer de Londres, se colocó un software de alta tecnología en la compañía de teléfonos Vodafone, que permitió que las conversaciones telefónicas fueran redirigidas a un conjunto de 14 teléfonos celulares 'sombra' que luego retransmitía las conversaciones a un sistema de grabación. Funcionarios dicen que las llamadas fueron interceptadas en teléfonos celulares que captaban la señal a través de una antena en una área cercana a la embajada de Estados Unidos. El gobierno griego inició una investigación judicial, pero negó que agentes estadounidenses estuvieran detrás de la conspiración. Vodafone informó al gobierno griego sobre el espionaje telefónico en marzo de 2005, pero antes de hacerlo, la compañía había bloqueado el sistema, haciendo imposible que los investigadores determinaran quién estaba realizando el espionaje.
¿Watergate griego? Teléfonos intervenidos de la élite política y military
Titular06 Feb. 2006