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Los residentes del mayor campo de refugiados en Francia, situado fuera de la ciudad portuaria de Calais en Francia, con frecuencia la llaman “La jungla”. Es un laberinto de tiendas rotas por el viento y caminos embarrados, donde la gente vive informalmente en secciones de acuerdo a sus países de origen. Caminar por el campo es como caminar por un mapa de los lugares bombardeados por Estados Unidos: Irak, Siria, Sudán y, por supuesto, Afganistán. De lejos, la mayor comunidad en el campamento son afganos que huyeron de catorce años de guerra. Democracy Now! visita la sección afgana, donde la gente cuenta su vida durante la guerra más larga de la historia de EE.UU., que el presidente Obama amplió indefinidamente en otoño pasado.
Transcripción
AMY GOODMAN: Estamos transmitiendo en directo desde la COP21, la cumbre de la ONU sobre el cambio climático en París, Francia. Pero ahora vamos a volver al campo de refugiados de Calais, que está a unas dos millas… dos horas en tren al norte de París. El lugar se encuentra en las afueras de Calais, una ciudad portuaria. Muchas gente en Francia, incluso los propios refugiados, llaman al campamento “La Jungla”. Es un laberinto de tiendas rotas por el viento, y caminos llenos de lodo, donde la gente vive en secciones informales, según su país de origen. Caminar por este campamento es como caminar por un mapa de los lugares bombardeados por Estados Unidos y sus aliados de Occidente: Irak, Siria, Sudán y, por supuesto, Afganistán. De lejos, la comunidad más grande del campo de refugiados de Calais es la afgana, formada por gente que huye de la guerra de Estados Unidos en Afganistán, que ya lleva 14 años.
Nermeen Shaikh, Laura Gottesdiener, Hany Massoud, Denis Moynihan y yo pasamos la mayor parte del sábado en la sección afgana del campamento, escuchando a la gente contar su vida durante la guerra más larga de la historia de EE.UU., que Obama extendió indefinidamente en otoño pasado. Primero cubrimos una protesta de los refugiados y hablamos con Majd, un refugiado sirio, luego fuimos al primer restaurante improvisado que se ha establecido en el campamento y conocimos a su dueño.
AMY GOODMAN: Recién estuvimos en la tienda donde vive Majd con otros dos hombres. Y ahora estamos en la calle de, bueno, de los restaurantes improvisados. Hay una barbería. Este es el Café Kabul. Y aquí, en la entrada, hay un mapa de todo el campamento. Entremos. Ya estamos en la parte trasera del Café Kabul —hace mucho calor en esta habitación trasera— para hablar con el propietario. ¿Puedes decirnos tu nombre?
SIKANDAR: Sí. Me llamo Sikandar.
AMY GOODMAN: ¿Puedes contarnos cómo fue que llegaste a este campo de refugiados?
SIKANDAR: Sí. Fue hace unos seis meses o más.
AMY GOODMAN: ¿Y de dónde vienes?
SIKANDAR: Soy de Afganistán.
AMY GOODMAN: ¿De qué parte de Afganistán?
SIKANDAR: De Nuristán, pero crecí en Kabul.
AMY GOODMAN: ¿Y por qué te fuiste de Afganistán?
SIKANDAR: Por la guerra. Por la política estadounidense. Por la política inglesa. Porque vienen a mi país a lanzar bombas, a usar armas. En mi país no tenemos armas. Así que vienen a usar estas armas en Afganistán, las usan los terroristas, los estadounidenses, cualquiera las usa en mi país. Así que hay una guerra en mi país, y yo estoy aquí.
AMY GOODMAN: Recién vimos una protesta por la muerte de un joven llamado Joseph, un sudanés que murió en la autopista, en la pasarela de arriba. ¿Te enteraste?
SIKANDAR: Sí, me enteré. Sí.
AMY GOODMAN: ¿Qué pasó?
SIKANDAR: Es algo que pasa todos los días. No fue sólo esta vez, ¿sabes? Ocurre todos los días, todas las semanas. Y hace un mes… en un mes murieron nueve personas aquí, en Calais.
AMY GOODMAN: ¿Qué te lleva a estar dispuesto a arriesgarlo todo?
SIKANDAR: Porque las personas como yo, tienen problemas en sus países, como yo. Si tengo un problema en mi país, tengo que seguir adelante, ¿sabes? Yo no puedo volver. Si vuelvo, estoy… es 100% seguro que voy a morir. Pero puedo tomar este riesgo. Me digo, bueno, si tengo el 50% de posibilidades de lograrlo, voy. Así que alguna gente… creo que la gente piensa de esta manera: si vuelvo, moriré, y mi vida ya está siendo muy mala. Es mejor intentarlo, con un 50% de posibilidades… quizás logre ir hasta allí y pueda llegar y tener una vida normal.
AMY GOODMAN: El presidente Obama ha dicho que la guerra en Afganistán está terminando. ¿Crees que es así?
SIKANDAR: Mientras los estadounidenses estén Afganistán, no terminará. Nunca.
AMY GOODMAN: El mapa de este campamento es como un mapa del mundo, o de una parte del mundo.
SIKANDAR: Sí.
AMY GOODMAN: Es un mapa del origen de los refugiados. Casi todos estos países han sido bombardeados por Estados Unidos.
SIKANDAR: No lo había pensado. El mapa de La Jungla es como un mapa del mundo.
AMY GOODMAN: Siria, Afganistán, Irak, Sudán.
SIKANDAR: Sí, sí. Si, si, si. Es verdad. No lo había pensado, pero sí, es cierto.
AMY GOODMAN: Seguimos caminando por el campo de refugiados, ubicado en las afueras de Calais. Mientras caminamos, algunas personas simplemente nos pasan de largo, otras se detienen y miran. Y cada tanto, alguien se acerca a hablar con nosotros. Pero nos han advertido una y otra vez que la gente no quiere mostrar su rostro. Tienen miedo. Tienen miedo de ser atacados aquí, y tienen miedo de que persigan a sus familias en su lugar de origen. Hace mucho frío y está nublado. Acaba de llover, así que está lleno de lodo. Y parece que va a volver a llover. ¿Quieres decir tu nombre?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Me llamo Sidiq Husain Khil y soy de Afganistán.
AMY GOODMAN: ¿Cuánto hace que estás aquí?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Llegué aquí hace cuatro meses y medio.
AMY GOODMAN: ¿Y por qué estás aquí?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Quiero ir al Reino Unido, ya que en Afganistán nunca se sabe, la situación es muy mala. Llegó Estados Unidos, queriendo acabar con Al-Qaeda y el terrorismo. Pero no lo lograron. En lugar de eso, en lugar de acabar con el terrorismo, intensificaron la guerra en Afganistán. Y la gente se encuentra en una situación muy mala. Todo por culpa de Estados Unidos.
AMY GOODMAN: ¿De qué parte de Afganistán vienes?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Vengo de Kunar.
AMY GOODMAN: ¿Cómo es? ¿Fue destruida? ¿Fue bombardeada?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Sí, Kunar fue totalmente destruida. Y había muchos estadounidenses allí. Había una base grande. Y todavía están bombardeando Kunar desde… del lado paquistaní. Toda la región de Kunar. Cada día, todos los días, Pakistán bombardea Kunar. Y al mismo tiempo, los estadounidenses también nos bombardeban, porque desde siempre el pueblo de Kunar es como, bueno, es gente religiosa, todo el pueblo, entonces son… es como el centro principal del Talibán.
AMY GOODMAN: ¿Por qué crees que los están bombardeando?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Porque dicen que son del Talibán, que son terroristas, por eso Estados Unidos está bombardeando allí. Y también Pakistán está bombardeando allí. Pakistán cree que la gente del Talibán se esconde allí. Y también pensaban que Osama estaba allí, y que el líder de Hezb-e Islami, Gulbuddin Hekmatyar, estaba ahí. Así que por eso Kunar sigue siendo atacada.
AMY GOODMAN: ¿Hubo ataques con aviones no tripulados en Kunar?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Sí, hubo ataques con aviones no tripulados.
AMY GOODMAN: ¿Y qué impacto tuvieron? ¿Sabes si produjeron víctimas?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Siempre matan gente inocente. Están bombardeando a la población civil en las aldeas. De hecho, no era gente del Talibán. Muchas veces matan civiles allí.
AMY GOODMAN: ¿Y cómo se siente la gente por eso?
SIDIQ HUSAIN KHIL: La gente está infeliz, decepcionada, con ambos lados, con el gobierno y con los… con todo el mundo, con Estados Unidos, con todo el mundo.
AMY GOODMAN: Al-Qaeda, Daesh, ¿crees que crecieron desde el 2001?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Desde el 2001, sí, porque bueno, cuando bombardean a la población civil, Estados Unidos o la OTAN, o cualquiera de esos grupos; cuando bombardean a civiles, los civiles se enojan mucho y se unen al Talibán. Por eso, cuando matan a una persona o a 10 personas, otras 100 se suman al Talibán. No van a apoyar al gobierno, porque el gobierno no puede ayudarlos.
AMY GOODMAN: ¿Entonces tú dices que los bombardeos aumentaron el terrorismo?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Sí. La guerra no es la solución para acabar con el terrorismo. Tienen que hablar cara a cara. Saber cuáles son sus demandas, ¿no? Mira lo que pasa en Siria. El mundo entero está bombardeando a Daesh, y siguen creciendo. No están logrando nada.
AMY GOODMAN: ¿Cuando fue que saliste de Afganistán?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Me fui de Afganistán en… creo que en agosto. No sé. Fue hace cinco o seis meses.
AMY GOODMAN: ¿Y cómo lograste salir?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Es una larga historia. Fue muy difícil. Bueno, todos saben como es. Me fui a Irán. Luego, después de eso, fui a Turquía. Después de eso, fui a Bulgaria.
AMY GOODMAN: ¿En auto? ¿Caminando? O…
SIDIQ HUSAIN KHIL: A veces en autobuses, a veces caminando por la montaña, para cruzar las fronteras.
AMY GOODMAN: ¿Y después de Bulgaria para dónde?
SIDIQ HUSAIN KHIL: De Bulgaria a Serbistán.
AMY GOODMAN: ¿A…?
SIDIQ HUSAIN KHIL: A Serbia.
AMY GOODMAN: ¿Y luego?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Después a Hungría.
AMY GOODMAN: ¿Y luego?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Luego a Austria.
AMY GOODMAN: ¿Y luego?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Y luego, bueno, a Italia, Francia. Y ahora estoy aquí.
AMY GOODMAN: Es un viaje larguísimo.
SIDIQ HUSAIN KHIL: Es un… sí, por supuesto, es un viaje muy largo. No es tan fácil como comprar el billete de avión e ir al aeropuerto, sentarse en el avión y venir directamente hasta aquí. Tuvimos que cruzar las fronteras de manera ilegal, lo que es muy difícil, una tarea muy difícil. Hemos perdido a muchos de nuestros amigos. Ellos perdieron… fallec, perdieron la vida. Algunas personas ya no están con nosotros ahora.
NERMEEN SHAIKH: ¿Y tu familia? ¿Está aquí contigo?
SIDIQ HUSAIN KHIL: No, mi familia no está aquí.
AMY GOODMAN: ¿Dónde está tu familia?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Está en Afganistán. Sí.
NERMEEN SHAIKH: Entonces, ¿qué crees que EE.UU. debería hacer ahora?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Como dije recién, Estados Unidos está intensificando la guerra. Estados Unidos realmente no quiere acabar con la guerra. Ese es su juego. Es el juego de George W. Bush, Obama y toda la Unión Europea. No quieren que se termine.
AMY GOODMAN: ¿Por qué?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Porque tienen… por detrás, hay ganancias, beneficios para ellos. Están vendiendo armas, que se usan en los países islámicos. Ese es el gran tema. ¿Cuánto es lo que gastan allí? Si lo que gastan es 100 dólares, lo que obtienen es 1000 dólares. No les importa la gente que está muriendo allí.
AMY GOODMAN: El presidente Obama dijo que están cerrando la guerra en Afganistán. ¿Cree que EE.UU. está terminando la guerra en Afganistán?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Perdón ¿qué quieres decir con “cerrando”?
AMY GOODMAN: Poner fin a la guerra.
SIDIQ HUSAIN KHIL: Poner fin. No, nunca pondrá fin a la guerra. Nunca pondrá fin a la guerra.
AMY GOODMAN: ¿Podrías estar a salvo en Afganistán?
SIDIQ HUSAIN KHIL: No lo creo. Si pudiese estar a salvo allí, no estaría aquí, no me gusta vivir en estas tiendas. Y no me gustan estos, los edificios altos, los países hermosos. Mi país es mi país. Pero bueno sabe, yo no estaba a salvo allí.
AMY GOODMAN: ¿Han cambiado aquí las cosas después de los ataques del 13 de noviembre en París?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Sí. Pero bueno, es… la policía está por todas partes. Hay mucha seguridad. Y sí, ahora ha cambiado totalmente. Antes estaba bien. En las fronteras también estaba todo bien. Ahora la seguridad se puso muy estricta.
AMY GOODMAN: ¿Estuvieron aquí las fuerzas de seguridad después de los ataques?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Sí. Vienen todas las noches.
AMY GOODMAN: Entonces, aunque el Reino Unido y Estados Unidos hayan bombardeado tu país, ¿igual tú quisieras ir a vivir allí?
SIDIQ HUSAIN KHIL: Sí, cualquier lugar es lo mismo para nosotros. Estados Unidos, Reino Unido, Francia… todos los países europeos son lo mismo para nosotros, porque nos han bombardeado y han destruido nuestros países. Pero en sus países está todo bien.
AMY GOODMAN: Después pasamos a otra zona, donde había, bueno, algo así como unas pequeñas furgonetas que la gente donó para las familias. Conocimos a una mujer que había sido maestra en Kabul, Afganistán, antes de huir con sus cuatro hijos. Ella y su hija de 12 años nos relataron su viaje.
DUR: Tuvimos que viajar en autobús, en auto, a caballo, en tren, para llegar aquí, en barco también.
AMY GOODMAN: ¿Puedes decirme cómo llegaste desde Afganistán a Francia?
DUR: Desde… Voy a dejar que mi hija te cuente.
AMY GOODMAN: Bueno, ¿cómo llegaron aquí desde Afganistán a Calais?
HIJA DE DUR: Primero fuimos a la provincia de Nimruz en Afganistán. Después fuimos… fuimos a Pakistán. Luego caminamos hasta Saravan, Baluchistán. Y luego a Iranshahr, Kermán, Shiraz, Teherán, Teherán, Kurdistán, y [inaudible], la frontera entre Turquía e Irán. Entonces empezamos a caminar por las montañas. Luego fuimos a la Turquía turca, luego [inaudible], luego Estambul, Izmir. Después llegamos al mar. Y luego…
AMY GOODMAN: ¿Tomaron un barco?
HIJA DE DUR: Sí, tomamos un barco. Después…
AMY GOODMAN: ¿Les dio miedo?
HIJA DE DUR: Sí.
DUR: Sí, todos nos asustamos con el barco. Al principio, cuando vi ese barco, yo no sabía nada del barco. Cuando vi que ellos… entonces me dijeron “sube”. Llamé a todos mis hijos y les dije [inaudible] y me puse a llorar. ’Ay, compré la muerte con dinero. Gasté todo mi dinero para comprarles la muerte, a todos ustedes. Sí.
AMY GOODMAN: ¿Para comprar qué?
DUR: Comprarles la muerte.
AMY GOODMAN: Comprarles la muerte a todos ustedes.
DUR: A todos ustedes. Y me puse a llorar.
AMY GOODMAN: Pero lo lograron. Y entonces, ¿a dónde llegaron?
LA HIJA DE DUR: A Grecia.
AMY GOODMAN: A Grecia.
HIJA DE DUR: Sí.
AMY GOODMAN: A Grecia. Y después, ¿a dónde fueron desde Grecia?
HIJA DE DUR: Luego fuimos a Macedonia, Serbia.
AMY GOODMAN: Macedonia.
HIJA DEL DUR: Sí.
AMY GOODMAN: Serbia.
LA HIJA DUR: Croacia. Y…
AMY GOODMAN: Croacia.
HIJA DE DUR: Croacia. Autriche.
AMY GOODMAN: Ah, Austria.
DUR: Hungría.
HIJA DE DUR: Ah, Hungría y luego Autriche.
AMY GOODMAN: Ah, Hungría y luego Austria.
HIJA DE DUR: Sí.
AMY GOODMAN: Vaya clase de geografía que han vivido. Escuchábamos a Dur y su hija de 12 años. Cuando salimos de su furgoneta y nos preparábamos para salir del campamento, un joven nos alcanzó corriendo. Dijo que quería contarnos su historia.
NAJIBULLAH: Me llamo Najibullah. Soy de Afganistán, de Kabul. Trabajé para la infantería de marina de EE. UU. en la provincia de Helmand, en Musaqara. Y…
AMY GOODMAN: ¿Cuándo?
NAJIBULLAH: Fue en 2011, sí.
AMY GOODMAN: ¿Qué hacías?
NAJIBULLAH: Era intérprete de la Infantería de Marina de Estados Unidos. Estábamos en una FOB, una Base de Operaciones de Avanzada. Y entonces… sí.
AMY GOODMAN: ¿Y cuánto tiempo trabajaste ahí?
NAJIBULLAH: Trabajé con ellos siete años… siete meses, digo.
AMY GOODMAN: ¿Y también trabajaste para un contratista de Estados Unidos?
NAJIBULLAH: Y antes de eso, sí, también trabajé en una empresa de construcción, la empresa Creative International. Estaban ejecutando un proyecto llamado “Crowded House”. Era un proyecto del DOD, Departamento de Defensa de EE.UU. para… estaban haciendo alcantarillas, puentes y muros de contención para la gente de la provincia de Daykundi.
AMY GOODMAN: Y entonces, ¿hiciste una solicitud para migrar a Estados Unidos?
NAJIBULLAH: Sí, solicité una visa especial de inmigración, pero me… como sólo trabajé durante siete meses, el gobierno de Estados Unidos me negó la visa, me dijeron: “Usted trabajó sólo siete meses, no llegó al año”. Y yo les envié una carta de la empresa Creative International que… como prueba de que había trabajado también con ellos. O sea que si juntamos todo, suma más de un año de trabajo. Pero aún así, me dijeron: “Eso no cuenta como evidencia. Debería enviarnos una carta del departamento de Recursos Humanos de la empresa”.
AMY GOODMAN: Un papel con algún tipo de el membrete de Creative Internacional.
NAJIBULLAH: Sí. Eso dijeron, pero esa carta que yo tenía era de la gente que trabajaba con nosotros de parte del Departamento de Defensa. Y los números y correos electrónicos eran, bueno, sólo eran vigentes en Afganistán. Y para cuando… desde el día en que ellos se fueron de Afganistán, esos números y direcciones de correo electrónico dejaron de funcionar. Lo que estoy tratando de decir es que si uno trabaja para el gobierno estadounidense, no importa que hayas trabajado sólo un día o un año entero, o dos años o cuatro años, al Talibán eso no le importa. Si tú trabajas con ellos tan sólo una hora, estás condenado a muerte. Y eso es lo que me pasó a mí. Pasé a estar condenado a muerte. Y le pregunto al gobierno estadounidense por qué me niega la visa. Así que por eso estoy aquí. Por eso estoy aquí, enfrentando esta dificultad.
AMY GOODMAN: Apenas algunos de los miles de afganos que están varados en el campo de refugiados de Calais, arriesgando sus vidas para llegar a Gran Bretaña. Hay un alambre de púa de doble fila, en algunos lugares triple, que fue instalado recientemente, para garantizar la seguridad en la entrada del Chunnel, como se conoce al Túnel del canal, así como en el área de aparcamiento de acoplados, para los camiones con destino al Reino Unido. Todos los camiones que entran en el túnel son registrados con termómetros infrarrojos que reaccionan al calor corporal, buscando polizones. Hace sólo unos meses montones de personas cruzaban el túnel de noche cotidianamente, ocultas en camiones o en el tren de alta velocidad. Ahora eso es casi imposible. La guerra de Estados Unidos en Afganistán ya lleva 14 años. El presidente Obama había prometido que para finales de 2015 retiraría la mayor parte de las miles de tropas estadounidenses desplegadas en Afganistán. Pero en octubre dio marcha atrás y, en lugar de eso, extendió indefinidamente lo que ya es la guerra más larga de la historia de Estados Unidos. Hay casi 60 millones de personas desplazadas, dispersas por el mundo, el mayor número registrado desde la Segunda Guerra Mundial. Un agradecimiento especial a Laura Gottesdiener, Nermeen Shaikh, Hany Massoud y Denis Moynihan de Democracy Now! Estamos en Francia. Regresamos en un momento.
[Pausa]
AMY GOODMAN: Sonaba “Borders” de la cantante M.I.A. Ella dirigió este video, que muestra a los refugiados en su peligroso viaje a Europa.
Traducido por Jorge Muñoz. Editado por Verónica Gelman, Clara Ibarra y Democracy Now! en Español.