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El actual ataque israelí contra Gaza, que ya le costó la vida a por lo menos 213 personas, “realmente es un acto de genocidio”, dice el Dr. Mustafa Barghouti, miembro del Parlamento Palestino y director de la Sociedad Palestina de Socorro Médico, que ha estado encabezando los esfuerzos para responder a la pandemia en Cisjordania y Gaza. Barghouti afirma que el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu —que enfrenta múltiples cargos de corrupción— está utilizando la actual violencia para salvar su futuro político. “Este hombre y su Gobierno están usando la sangre palestina, y quizás también la sangre israelí, para mantenerse en el poder, para eludir los tres juicios por corrupción que tiene que enfrentar; está haciendo lo que sea para mantenerse en el cargo”.
Transcripción
AMY GOODMAN: Pasamos ahora a Cisjordania, para hablar con el doctor Mustafa Barghouti, miembro del Parlamento de Palestina, director de la Sociedad Palestina de Socorro Médico, quien ha estado encabezando los esfuerzos para gestionar la pandemia en Cisjordania y Gaza. Dr. Barghouti, usted tenía COVID-19 la última vez que conversamos. Más recientemente, se encontraba en la mezquita de Al-Aqsa cuando las fuerzas israelíes comenzaron su incursión. Usted ha dicho que los equipos de rescate palestinos fueron atacados y golpeados cuando intentaban ayudar a los heridos. ¿Puede hablar sobre los ataques contra centros médicos de Gaza? Usted supervisa la respuesta a la pandemia tanto en Cisjordania como en Gaza. Háblenos sobre los ataques a centros de salud, las muertes del personal médico y la magnitud de todo esto. Usted es además una importante figura política. El primer ministro Benjamín Netanyahu dice que Israel no detendrá el bombardeo.
MUSTAFA BARGHOUTI: Gracias. Gracias por su invitación. Quiero expresar que nuestros corazones están realmente destrozados por lo que estamos viendo en Gaza, en especial por la pérdida de nuestros colegas en el hospital. Lo que está sucediendo es un verdadero acto de genocidio. No es solo un bombardeo. No es solo un ataque salvaje contra la población civil. La verdad es que Netanyahu ha fracasado estrepitosamente. No ha obtenido ningún éxito militar. Y puedo asegurar que ni siquiera tiene objetivos militares. Este hombre y su Gobierno están usando sangre palestina, y tal vez incluso sangre israelí, para mantenerse en el poder y evadir los tres casos de corrupción que tiene que enfrentar. Netanyahu está haciendo todo lo posible para mantenerse en su cargo. Lo que está pasando en Gaza es totalmente inaceptable. Por cierto, a las 213 personas asesinadas en Gaza hay que agregarle 25 palestinos que fueron asesinados en Cisjordania durante la última semana. Hay 1.400 heridos de gravedad en Gaza, pero además de eso hay 3.000 heridos en Cisjordania. Y mientras hablamos, el ejército sigue disparando a la gente aquí en Ramallah, en Hebrón y en Belén. Algunos de ellos están en estado crítico porque recibieron impactos de balas de alta velocidad. En cuanto a lo sucedido en Gaza, es muy importante mencionar que el ejército israelí eliminó por completo a 14 familias. Es decir, mataron al abuelo, a la abuela, al padre, a la madre y a todos los niños. Catorce familias han sido eliminadas de los registros civiles. Es algo horrible. Y de estas 14 familias solo sobrevivió un menor, un bebé de 2 meses que perdió a sus nueve hermanos y hermanas, así como a su madre y su padre. ¿Qué futuro le espera a este niño? Eso es lo que más me preocupa. El otro punto que quiero mencionar es que además del bombardeo y la destrucción de viviendas, y no hay ninguna justificación para la destrucción que causaron a todos estos edificios las bombas israelíes, bombas que son de fabricación estadounidense. No hay justificación para bombardear viviendas y destruirlas por completo mientras la gente está durmiendo, sabiendo que Gaza carece de equipos de rescate, sabiendo que Gaza ha estado sitiada durante 15 años, desde 2006, y los equipos de salvamento de la Defensa Civil datan de 1996. Así que no solo bombardean a la gente y la dejan atrapada bajo los escombros… Imagine lo que siente una persona que escucha la débil voz de un niño o de una madre o de un hombre bajo los escombros, y no puede llegar hasta él, y esa persona muere asfixiada. Es una situación terrible. En otros países, cuando ocurre un terremoto, la gente se apresura a ayudar. Otros países ayudan de inmediato. ¿Qué hemos recibido nosotros de otros países excepto declaraciones de que Israel tiene derecho a defenderse? ¿Defenderse? Es un país que nos está ocupando. Es la entidad que practica el apartheid contra el pueblo palestino. No se pueden equiparar ambos bandos. Y no solo están haciendo eso, sino que se ponen del lado de Israel, del agresor. Hay algo más que quiero decir sobre lo que está sucediendo en Gaza. Estamos recibiendo muchas llamadas de madres y padres, y tenemos a nuestros colegas trabajando sobre el terreno. Lo peor es el estrés psicológico que se ejerce contra los niños, bombardeo tras bombardeo, la noche entera. Lo que estamos viendo en Gaza contra la población palestina, pero en especial contra los niños palestinos, es terrorismo psicológico. Es el terrorismo psicológico que Netanyahu y su Gobierno están perpetrando contra el pueblo palestino. Y mientras nos ocupábamos de intentar detener la epidemia de COVID-19, que ha alcanzado un nivel crítico en Gaza porque la tasa de contagio es del 30%, lo que significa que de cada cien pruebas que haces, resultan 30 casos positivos de COVID-19. Eso quiere decir que hay una propagación comunitaria muy peligrosa. Y ahora no podemos hacer nada porque no se pueden hacer pruebas. No hay vacunas disponibles. Como saben, Israel practicó lo que yo llamo un apartheid de vacunas contra el pueblo palestino. Obtuvieron vacunas suficientes para todos los israelíes y no le dieron nada a los palestinos. Y se quedaron mirando mientras la gente enfermaba tanto en Cisjordania como en Gaza. Ahora hay una escasez de vacunas en Gaza, e incluso las pocas que hay no pueden ser distribuidas debido al bloqueo de la asistencia sanitaria y a los bombardeos. Y ahora han perdido el único laboratorio que hace pruebas de COVID-19. Nuestro personal de Socorro Médico, que está presente en todo Gaza, ahora ha tenido que dejar de tratar a pacientes con COVID-19 para brindar atención a las personas heridas que no pueden ser atendidas en los hospitales debido a la gran cantidad de heridos y tienen que ser atendidas en sus casas. Así que ahora nuestros equipos de rescate tienen que tratar a los heridos. Nuestros otros equipos tienen que ir a las escuelas de la ONU, donde hay 45.000 personas que han sido desplazadas de sus casas y apartamentos tras los bombardeos. Necesitan mantas. Necesitan comida. Necesitan agua. Les hace falta de todo. Así que tenemos que enfrentar una combinación de problemas como resultado de la terrible masacre que está llevando a cabo Israel. No hay justificación para eso. Todo empezó cuando Israel atacó a los fieles reunidos pacíficamente para realizar sus oraciones en la Mezquita de Al Aqsa. Yo estaba allí. Los vi atacar no solo a los fieles durante sus oraciones, sino que también atacaron a los equipos de rescate y los golpearon. Tuvimos 1.000 heridos en Jerusalén tras los ataques del ejército israelí. Seis de ellos han perdido los ojos a causa de las heridas. Además de eso, quieren llevar a cabo una limpieza étnica en el área de Sheikh Jarrah. Permítame explicar algo: en Sheikh Jarrah hay 500 personas, varias familias, que han vivido allí desde los años 50. Estas familias fueron reubicadas en Sheikh Jarrah tras la limpieza étnica que Israel cometió en 1948. Estas personas vinieron de Jaffa, de Ramla, de Lod, de Jerusalén occidental, porque el ejército israelí los expulsó. Ahora el ejército llega a sus casas y quiere desalojar una vez más a esas familias y llevar a cabo una limpieza étnica. ¿Para reemplazarlas con quién? Con colonos ilegales, a quienes respalda el Gobierno israelí. Este es un terrible ejemplo de sistema de apartheid. Esto no es solo una ocupación militar. Es una combinación de ocupación, sistema colonial de asentamientos y un sistema del peor tipo de apartheid que la humanidad jamás haya visto, mucho peor que el apartheid que prevaleció en Sudáfrica en su momento. Y esto tiene que terminar. Tiene que terminar. Por eso estoy muy orgulloso de decir que hoy el pueblo palestino, todo el pueblo palestino, en las áreas establecidas en 1948, en lo que ellos llaman Israel, en Cisjordania y Gaza y Jerusalén Este, gente en la diáspora, todos los palestinos, tal vez por primera vez desde 1948, están unidos en una sola lucha para acabar con este sufrimiento, una lucha para acabar con la ocupación, para terminar con este sistema de apartheid que ha durado más de lo que nadie debería tolerar. Lo que hoy vemos es una huelga unificada, manifestaciones unificadas, el pueblo unificado que, en mi opinión, está muy por delante de sus líderes. Y sus líderes deben entender eso y ser conscientes de que es la hora de la unidad y de una estrategia conjunta en la lucha por todos los palestinos.
JUAN GONZÁLEZ: Dr. Barghouti, quería preguntarle sobre el papel de Estados Unidos y también de los otros Estados árabes antes del recrudecimiento de la crisis, en especial de los bombardeos, la destrucción del edificio donde operaba Associated Press, Al Jazeera y otras agencias de noticias. El secretario de Estado de EE.UU. Antony Blinken dijo el 17 de mayo que no tiene pruebas, no ha visto evidencia de que el edificio fuera usado por Hamas. Sin embargo, el Gobierno israelí insiste en que sí lo usaban. Sin embargo, el Gobierno de Biden no ha dicho nada sobre los ataques que se han producido contra la prensa. ¿Cuál es su opinión sobre la postura del Gobierno de Biden en este momento y qué debería estar haciendo, y también sobre el silencio abrumador de los Estados árabes?
MUSTAFA BARGHOUTI: Bueno, en primer lugar, quisiera decir por supuesto que cualquier cosa después de Trump parece mejor, porque Trump fue el peor presidente, no solo de Estados Unidos, sino el peor presidente de la historia de cualquier lugar del mundo. Ese hombre trató de liquidar el tema de Palestina. Y también forzó a muchos países árabes a entrar en una relación normalizada con el sistema de apartheid en Israel. Pero el Gobierno de Biden no es que sea mucho mejor. Este compromiso con la alianza con Israel y este sesgo completo hacia Israel es inaceptable. No entiendo cómo el Sr. Blinken, e incluso el Sr. Biden, sigue hablando del derecho de Israel a defenderse, pero no hace ninguna mención sobre el derecho de los palestinos a resistir la ocupación y a resistir el apartheid y también a defenderse a sí mismos. Esta asimetría, este comportamiento inaceptable, está alentando a Israel. No entiendo por qué Estados Unidos ha bloqueado tres veces la posibilidad de una declaración o resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para pedir un alto el fuego. ¿Por qué? Solo porque Israel lo quiere así. No entendemos como el Gobierno de EE.UU. se atreve a firmar un nuevo acuerdo para enviar más bombas y más misiles a Israel, mientras se está cometiendo este crimen de guerra contra el pueblo palestino, porque lo que sucede en Gaza no es más que un crimen de guerra, un crimen de guerra y de lesa humanidad. No entendemos por qué el Sr. Biden no escucha a las buenas personas del Partido Demócrata, personas como Ilhan Omar, Rashida Tlaib, Cortez y Bernie Sanders, quienes dicen que ya es suficiente. ¿Y por qué debería Estados Unidos continuar protegiendo la ocupación? ¿Por qué debería continuar protegiendo un sistema de apartheid? Es totalmente inaceptable Y tiene que cambiar. Nos sorprendió que el Sr. Biden haya hecho tantos cambios en las políticas del Gobierno, haya liberado a las agencias gubernamentales de las restricciones que Trump les impuso con respecto a la Organización Mundial de la Salud o al tema del medio ambiente o a lo relacionado con México o a la relación con los países europeos, pero cuando se trata de Palestina, mantiene la misma política. Incluso alabaron los acuerdos de normalización en la región, que son engañosos, y los consideraron un gran esfuerzo por parte del Gobierno de Trump. Esto tiene que cambiar. Estados Unidos tiene que dejar de hacer eso y debe ser justo. Tienen que aceptar nuestro derecho como palestinos a ser libres, nuestro derecho a ser libres de la ocupación y del sistema de apartheid israelí. Esto, por cierto, será beneficioso para todos en la región y no solo para los palestinos. En cuanto a los países árabes, no estamos contentos, estamos decepcionados porque hasta ahora los países árabes no han hecho lo que deberían hacer. Y no les estamos pidiendo que luchen contra Israel, pero les pedimos que al menos dejen de normalizar un sistema de apartheid y de ocupación, que corten las relaciones hasta que Israel pare esta opresión contra el pueblo palestino. Creemos que deberían hacer mucho más. Desde luego no podemos hacer generalizaciones, porque algunos países sí están haciendo un buen trabajo. Algunos otros no están haciendo lo suficiente. Pero sí sé una cosa: los pueblos del mundo árabe están todos del lado del pueblo palestino. Eso es lo que hemos visto en las grandes manifestaciones, cientos de miles de personas en Yemen, en Irak, en Túnez, en Marruecos, en tantos países, y principalmente en Jordania y Líbano. Mucha gente en Jordania ha tratado por todos los medios posibles de contactar con nosotros. Por lo tanto, creo que hay una gran discrepancia, una gran diferencia entre las posturas de los pueblos de estos países y las posturas de los Gobiernos.
AMY GOODMAN: Dr. Mustafa Barghouti, queremos agradecerle por estar con nosotros. Médico, miembro del Parlamento palestino, director de la Sociedad Palestina de Socorro Médico, que nos acompañó desde Ramallah en Cisjordania.
MUSTAFA BARGHOUTI: Gracias.
AMY GOODMAN: A continuación, vamos a Jerusalén para hablar con el director del grupo de derechos humanos B’Tselem.